Se cumple otro 12 de octubre sin la estatua de Colón en Paseo de la Reforma; sin embargo, la comunidad indígena en la Ciudad de México asevera que no hay nada qué celebrar, pues el contexto de la Glorieta y la política pública hacia esta población sigue siendo la misma.
Cabe recordar que fue el año pasado -dos días antes del ‘Día de la Raza’- cuando las autoridades decidieron retirar la estatua de la avenida más emblemática de la capital del país con fines de restauración; no obstante, la obra nunca regresó.
La pieza del escultor francés Charles Cordier, víctima por muchos años de violencia en protestas por los derechos indígenas, terminará -según el Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos de la CDMX- en un lugar menos prominente llamado Parque América, en Polanco.
Lo anterior, dará paso a que, en Reforma, se dé un homenaje a millones de indígenas que murieron a causa de la violencia y las enfermedades durante y después de la conquista.
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Pese a tal decisión, el Movimiento Indígena en la Ciudad de México asegura que aún hay muchos pendientes con la comunidad e incluso no cambia en nada la reubicación de la estatua.
“No hay un cambio, un giro, una nueva política, un nuevo trato. Es un trabajo todavía de mucho tiempo el que nos falta. El retiro de Colón fue un acto sino político, con fines estéticos para la ciudad”, declaró a Publimetro, Daniel Hernández, integrante de dicho Movimiento en la ciudad.
‘Glorieta de las Naciones Indígenas’
La comunidad indígena en la capital del país demanda el reconocimiento de los pueblos originarios, la resistencia y el valor histórico de un pasado milenario.
Con base en ello, exhortan a que el espacio antes ocupado por Colón se resignifique de fondo y sea nombrado ‘Glorieta de las Naciones Indígenas’, sí, con la representación de una mujer pero, pero con características de alguno de los 68 pueblos vivos y de cuerpo completo, ‘no una cabeza que emula a una mujer mesoamericana’ como la que proponía el escultor Pedro Reyes.
“Proponemos que sea un monumento las naciones indígenas tomando en cuenta que la mujer es una nación porque da vida y puede generar y poblar. Nuestra propuesta es concreta y creemos que sí abona a que empecemos a revalorar a nuestros ancestros; vernos como lo que somos; una nación milenaria”, enfatizó.
Este 12 de octubre, Daniel Hernández aseveró que las 45 agrupaciones indígenas que conforman en Movimiento no saldrán a marchar a la Glorieta ‘sin Colón’ ya que consideran que ya no aporta en nada asistir a ese lugar; sin embargo desde otro punto manifestarán su llamado para cambiar por completo la Glorieta y que las autoridades les den certeza de que Colón no regresará en futuras administraciones.
“En particular el Movimiento Indígena en la ciudad no estará participando, pero tal vez sí otros representantes de pueblos originarios, haciendo lo de cada año, dejando ver lo que fue el colonialismo, ir a la glorieta, derribar, expresar, gritar, manifestarse con amigos artistas como Antonio Gritón como cada año haciendo pintas”, acotó.
En tanto, aseveró que los pendientes con la comunidad indígena en la capital son muchos, entre ellos, el rezago de más de cinco mil familias sin vivienda, el desempleo que se acrecentó por la pandemia y la falta de reconocimiento que conlleva a la discriminación.
Tres preguntas a...
Martín Ríos, historiador
¿Cuál sería el fin de reubicar la estatua de Colón?
- Me parece una decisión realmente inteligente, es una estatua que había sufrido mucho en los años pasados había sido pintada, lastimada, ultrajada y también reconocer que había estado un poco abandonada por la capital en la gestión anterior. Es una forma de dignificar a la estatua y de ser sensibles a las inquietudes de otros sectores de la sociedad.
¿Cambiará en algo la historia?
- Mover la estatua de sitio no cambia nada, no le va a restar ninguna importancia a la gesta colombina y tampoco evitará que se escriba algo distinto, es decir, no niega que halla habido esclavitud y desaparecido precisamente toda la población indígena, pero insistiré en decir que no podemos juzgar el pasado con los ojos del presente, tenemos que comprender por qué surgieron esos acontecimientos.
¿Positivo, reemplazarla por una mujer indígena?
- Es bueno que se planteen otros monumentos históricos, que bueno que se reivindica el papel de las mujeres en la historia, es fundamental reconocerlo, pero lo que sí me gustaría como historiador es que algún día ambas estaturas pudieran convivir porque tanto Colón como las mujeres indígenas forman parte de la historia y el pasado no lo podemos cambiar sino conocerlo, asumirlo, aceptarlo y cambiar de nuestro presente todas aquellas cosas que no nos gustan, porque no sirve de nada mover a Colón si seguimos discriminando a los pueblos indígenas, negándoles derechos políticos, sociales, culturales y económicos.