Descubrir las ofertas de El Buen Fin es más fácil de los que imaginas; sólo necesitas saber dónde te ofrecen el mejor descuento y las condiciones de pago más atractivas para ese producto o servicio que buscas o necesitas comprar.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) explicó que aprovechar las ofertas también significa cuidar tu cartera; sólo comprar lo que puede pagar y evitar las compras por impulso.
“Considera tu capacidad de compra y piensa si lo que deseas adquirir realmente lo necesitas o es un deseo; y si tiene una vida útil más larga que lo que tardarás en liquidarlo.
“Revisa los precios en diferentes tiendas y comercios participantes en El Buen Fin; así sabrás si son de verdad una oferta o están inflados por la temporada”, recomendó la Condusef a través de su cuenta de Twitter.
Claves para ubicar ofertas reales
El mercadólogo y especialista en finanzas, Moisés Álvarez, explicó a Publimetro que existen tres puntos clave para descubrir y aprovechar las ofertas del llamado fin de semana más barato del año.
Indicó que la primera consiste en saber que una “oferta real” brinda un descuento mínimo de 20% o 30%, sobre el precio marcado en la etiqueta; mismo que puedes comprobar al comparar las promociones y precios marcados por otros establecimientos o páginas de Internet.
Refirió que la segunda clave está en verificar las condiciones y facilidades de pago que ofrece el establecimiento o proveedor; e identificar si alguna de ellas se ajusta a la liquidez de tu bolsillo o línea de crédito.
Y tercera, apuntó Moisés Álvarez, es muy importante saber que, por más real que sean, las ofertas de El Buen Fin se desvanecen cuando hay mensualidades que comprometen más de 30% de tu ingreso o cuando contratas una deuda por más de 12 meses.
“Los expertos en finanzas siempre recomiendan comparar precios y calidad, comprar sólo lo que puede pagar y no abusar del crédito; lo cual, como dice la Condusef, también es parte de una buena oferta.
“Lo único debemos agregar, es que las ofertas reales implican un descuento y facilidades de pago relevantes por tratarse de El Buen Fin; además de que se ajustan a tu capacidad de pago o crédito; sin mantenerte endeudado hasta el siguiente Buen Fin”, subrayó el especialista.
¿Cómo elijo la mejor oferta?
Para identificar una oferta real y aprovechar los descuentos, la Condusef y los especialistas en finanzas personales te recomiendan:
- No te dejes apantallar por las emociones o la propaganda que despliegan las tiendas o la insistencia de los vendedores. Recuerda que una verdadera rebaja te ofrece, al menos, 20% o 30% de descuento.
- Haz una lista de productos o servicios que requieres; descarta todos lo que resulten innecesarios o poco útiles. Si deseas un vestido que usarás una vez y no es el de tu boda, no vale la pena comprarlo; así tenga 80% de descuento.
- Compara los precios y promociones que ofrecen las tiendas. Acude hoy mismo a dos o tres tiendas o consulta en la Web el costo normal del artículo de tu interés y checa que haya una oferta real durante El Buen Fin.
- Ten cuidado con los meses sin intereses. Este tipo de promociones son un plan de pago diferido; que no representa un precio más bajo y que puedes tardar en liquidar hasta uno o dos años. El pazo ideal para usar dicho mecanismo son seis o máximo nueve meses.
- Dile ¡no! al consumismo. Las frases “compre hoy y pague en dos meses”, “llévate 3×2″ o “rebaja sobre rebaja” son una oportunidad de consumo, no una obligación de compra ineludible.
- Antes aceptar la compra o deslizar tu tarjeta de crédito pregúntate: ¿en realidad necesito este artículo o servicio?, ¿puedo pagarlo? y ¿cuánto tiempo tardaré en liquidar la cuenta?
- Pregunta al vendedor cuáles son las tarjetas, formas de pago y marcas participantes en las ofertas o promociones. Es importante saber si hay monto mínimo de consumo, un plástico que te ofrezca un descuento adicional o alguna otra promoción que puedas combinar.
- Nunca acudas a ver qué te encuentras en las tiendas; porque ello te obliga a consumir por consumir. Piensa qué tipo de ropa, zapatos, electrónicos, muebles o servicios necesitas.