La inflación creciente en el país, que registró un incremento del 7.05% en la primera quincena de noviembre, es la mayor en 20 años, aunque el saldo del alza de precios desde 2018 ha impactado en productos básicos para las familias mexicanas.
Pese a que en los últimos registros el aumento más notorio se encuentra en los energéticos, el tomate, los chiles o el transporte aéreo, alimentos de la canasta básica como el frijol, el arroz, el pollo, la sopa de pasta, el jamón, la leche y la lenteja son los que han sufrido un mayor incremento.
En los últimos tres años, según cifras de la Secretaría de Desarrollo Económico de la Ciudad de México (Sedeco) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) el aumento en el precio del arroz por kilo fue de un 77%, de 19.49 a 34.53 pesos.
Para el frijol por kilo hubo un alza del 74%, de 22 a 39 pesos, y el pollo entero sufrió un incremento del 66%, es decir, de 39 a 65 pesos.
Con el paulatino aumento de la inflación en el último año, con un promedio quincenal del 6%, el poder adquisitivo de los mexicanos ha sido fuertemente impactado, a pesar del incremento del salario mínimo que se elevó un 15% a nivel nominal y de manera general se ubica en 141.7 pesos.