La Organización Mundial de la Salud (OMS) nombró a la nueva variante del virus localizada en Sudáfrica como “Omicron”, en referencia al alfabeto griego, y la calificó como una versión preocupante del SARS-CoV-2 debido a su rápida transmisibilidad.
De acuerdo con la agencia de salud, la versión del virus es peligrosa por sus múltiples mutaciones, aunque aún faltan investigaciones para conocerla a fondo. Señaló que están en marcha varios estudios y se informarán de manera gradual los resultados.
El hallazgo de las primeras infecciones del virus se realizó el 24 de noviembre, aunque el primer caso procede de una muestra tomada el 9 de noviembre. La autoridades del país aceleraron la toma de muestras ante el creciente número de casos de Covid, después de superar hace algunos meses un pico por la variante Delta.
Al respecto, la OMS alertó por un riesgo mayor de reinfección a causa de la composición de la variante, con diferencias en la proteína “spike” en comparación con sus predecesoras.
“La evidencia preliminar sugiere un mayor riesgo de reinfección con esta variante”, expresó.
Ante tal panorama, pidió a los países redoblar sus esfuerzos en materia de vigilancia y secuenciación del virus. También, notificar de las infecciones al organismo y mejorar medidas de salud pública.
Asimismo, exhortó a la población no bajar la guardia y seguir con el respeto a las normas de prevención del virus como el uso de cubrebocas, el distanciamiento social, evitar multitudes, espacios bien ventilados y lavado de manos.
