El gobierno peruano respondió a las críticas que desató el envío, de parte de México, de una delegación para asesorar al presidente Pedro Castillo, y afirmó que “entre presidentes siempre hay diálogo” y que las reuniones se dieron en el marco de la “colaboración mutua entre Estados”.
En conferencia de prensa, cuestionada sobre el por qué “el presidente Castillo pidió ayuda al presidente Andrés Manuel López Obrador para enfrentar una posible vacancia”, y sobre si “eso no es trabajo o responsabilidad de su Consejo de Ministros”, la presidenta del Consejo de Ministros (gabinete) peruano, Mirtha Vásquez, respondió:
“Respecto a la supuesta ayuda que el presidente Castillo ha pedido al presidente de México, creo que hay que entender que entre presidentes hay diálogo siempre diplomático, de colaboración, de ayuda mutua entre países para lograr varios objetivos; entre ellos puede ser la lucha contra la pobreza, a fortalecer la democracia, etcétera”.
El mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, anunció el lunes el viaje a Perú de una delegación encabezada por el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, que incluyó a la subsecretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, la encargada de proyectos de apoyo a países extranjeros de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
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López Obrador dijo que su homólogo peruano “nos pidió apoyo [ya que] enfrenta toda una campaña en contra, mediática, además alentada en la inflación, plantean que es por incapacidad. Fuimos muy respetuosos a apoyar sobre todo lo que se puede hacer para ayudar a la gente humilde, la gente pobre, en tiempos difíciles”.
Dudas sobre apoyo de López Obrador
Pero la noticia no cayó bien entre los legisladores peruanos, que exigieron explicaciones sobre la visita.
Ernesto Bustamante, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso y perteneciente al partido Fuerza Popular, presidido por la opositora Keiko Fujimori, envió el martes un oficio dirigido al canciller Óscar Maúrtua de Romaña.
En el documento, Bustamante, cuyo partido apoyó una fallida moción para destituir a Castillo por incapacidad moral, exige explicaciones sobre “la veracidad y pertinencia de las declaraciones realizadas públicamente” por López Obrador sobre el envío de funcionarios. Ello, asegura, “constituiría una clara intromisión en los asuntos internos de Perú”.
También pidió información “sobre la relación nominativa de los funcionarios mexicanos que arribaron a Perú en dicha misión y se sirva detallar las actividades específicas que realizaron en nuestro país los citados funcionarios extranjeros y otros”.
Finalmente, el congresista cuestionó qué “acciones sancionadoras y correctivas ha tomado la Cancillería” peruana por estos hechos.
¿Ayuda o intromisión?
Al respecto, Vásquez señaló que “nosotros también como se ha solicitado desde el Congreso, tenemos la disposición de hacer un informe desde Cancillería sobre los detalles de estas reuniones que creo que son más bien reuniones que se llevan a cabo en el marco justamente de esta colaboración mutua entre Estados y que que tienen toda la legitimidad”.
Luis Gonzales Posada, ex canciller y ex presidente del Congreso peruano, también cuestionó el envío de una delegación mexicana.
En declaraciones al diario Expreso, Gonzales dijo que se trata de un acto de intromisión y lamentó que no haya una Cancillería que “les haga el pare”, que señale que los extranjeros no se pueden entrometer en asuntos de política exterior de Perú.
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“Lo que diga López Obrador no tiene relevancia, porque no es una persona muy lúcida y mentalmente ha sido captado por el grupo chavista. Este hombre se ha convertido en una pieza utilizable de la izquierda totalitaria”, señaló el ex canciller. Sin embargo, lamentó que Castillo recurra a otro presidente para pedir auxilio. “Es inédito, algo que nunca se ha conocido en nuestra historia”, aseguró.
En 2019, en una columna publicada también en Expreso, Gonzales criticó a López Obrador, señalando que “ha abdicado a sus principios” por ofrecer asilo político al expresidente boliviano Evo Morales. “Adiós, pues, a la expresión ‘Señor Anti Fraude’, como llamaban a López Obrador, expresión que se simplifica eliminando la palabra ‘anti’ para en adelante nominarlo ‘Señor Fraude’”.