MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Malí, actualmente bajo embargo de los países del oeste de África, ha dado a las aerolíneas que operan en el país africano un plazo de 72 horas a partir de este sábado para que declaren si seguirán desempeñando sus actividades o de lo contrario restringirá sus espacios de aterrizaje.
«Después de este plazo, sus espacios se entregarán a otras aerolíneas para garantizar la continuidad de los servicios», ha avisado la ministra de Transporte de Malí, Dembélé Madina Sissoko, en un comunicado recogido por Bloomberg.
El plazo se aplica a partir del sábado y sigue a la imposición de sanciones por parte de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), por la demora electoral tras el golpe de Estado de 2020.
Air France-KLM ya suspendió los vuelos a la capital de Malí, Bamako, a pesar de no estar cubierta por las sanciones, junto a las aerolíneas regionales Air Senegal y Air Cote d’Ivoire.
Los líderes de la CEDEAO respaldaron el pasado domingo las medidas aprobadas unas horas antes por la Unión Económica y Monetaria de África occidental (UEMOA) por la que congelaban los activos malienses dentro del área del Banco Central de los Estados del África Occidental (BCEAO).
Asimismo, decretaron el cierre de las fronteras entre Malí y los estados miembro de la organización e imponer un embargo de mercancías que no afecta a suministros médicos y productos esenciales, al tiempo que acordó retirar a los embajadores en Malí de sus países miembro e impuso otras sanciones relacionadas con la ayuda financiera.
La decisión llegó después de que las autoridades propusieran extender la transición otros cinco años, si bien la CEDEAO –que ya anunció sanciones contra Malí en noviembre–, que sospecha de los argumentos proporcionados por la junta.
Los militares citan la persistente inseguridad en el país, plagado de violencia de todo tipo, y la necesidad de reformas constitucionales para garantizar la fiabilidad de los comicios.