MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El Comité Nacional del Partido Republicano ha presentado formalmente una moción de censura contra dos de sus miembros caídos en desgracia, Liz Cheney y Adam Kinzinger, ambos únicas representaciones de esta formación dentro de la comisión de la Cámara de Representantes de Estados Unidos que investiga el asalto al Capitolio.
La moción, que se votará este viernes en la sesión del comité nacional, ha sido presentada por David Bossie, uno de los miembros del partido leales al expresidente Donald Trump e integrante de la filial republicana de Maryland.
En ella se pide «cesar de manera inmediata» a Liz Cheney y Adam Kinzinger por su «comportamiento destructivo» para la Cámara de Representantes de Estados Unidos, después de que ellos hayan sido las únicas voces de gran peso dentro del partido partidarios de investigar la implicación de Trump en aquellos disturbios en los que una turba la emprendió contra el Capitolio el 6 de enero de 2021.
«La Conferencia no debe ser saboteada por los representantes Liz Cheney y Adam Kinzinger, quienes han demostrado, con acciones y palabras, que apoyan más los intentos de los demócratas por destruir al presidente Trump que de recuperar una mayoría republicana en 2022», señala el escrito al que ha tenido acceso la NBC.
Para la acusación, Cheney y Kinzinger se han involucrado en una serie de acciones, como parte del comité que integran, que no solo no es propio de los miembros del Partido Republicano en el Congreso, sino que además «parecen tener la intención de promover la sombría agenda política de los demócratas».
El texto no solo ha sido mal recibido, como era de esperar, por parte de los implicados, sino por otros republicanos de peso, como el senador Mitt Romney, para quien «la vergüenza» recaería en el partido si sale adelante una moción contra dos personas que solo «buscan la verdad frente a la malicia».
«El honor corresponde a Liz Cheney y Adam Kinzinger por buscar la verdad incluso cuando hacerlo tiene un gran coste personal», ha defendido el senador Romney en sus redes sociales.
Por su parte, Cheney, a quien ya despojaron sus compañeros de partido de su puesto de liderazgo dentro del Congreso, ha lamentado que los altos mandos republicanos se hayan convertido en «rehenes voluntarios de un hombre que ha admitido que intentó anular las elecciones presidenciales y que sugiere que perdonaría a los acusados del 6 de enero», en clara alusión a Trump.
«Soy una conservadora constitucional y no reconozco a aquellos de mi partido que han abandonado la Constitución para abrazar a Donald Trump. La historia les juzgará. Nunca dejaré de luchar por nuestra república constitucional», ha dicho.
En esa línea se ha manifestado también Kinzinger, quien ha lamentado que algunos en el partido dediquen sus esfuerzos en «censurar» a dos de sus compañeros por el simple hecho de «defender sus juramentos» cuando asumieron el cargo, en vez de «ayudar al pueblo estadounidense».
«Han permitido que las conspiraciones y el tribalismo tóxico obstaculicen su capacidad para ver con claridad», ha expresado el representante por Illinois.