Después de los enfrentamientos que se suscitaron el pasado 5 de febrero entre elementos de la Guardia Nacional y estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, se reforzó la presencia de elementos antimotines en las casetas de Palo Blanco, en Chilpancingo, y de La Venta, en el municipio de Acapulco.
Aunque la gobernadora refrendó a través de sus redes sociales su postura de no represión. La línea de los gobiernos estatal y federal se mantiene firme con respecto al reforzamiento de la seguridad en las casetas de la Autopista del Sol.
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Medios locales reportaron la presencia de al menos 60 policías en la caseta de cobro Palo Blanco, así como 12 patrullas y 10 camiones pertenecientes a la Guardia Nacional. Mientras que en La Venta se informó sobre una carpa acondicionada con literas y cocina para atender a alrededor de cien elementos de seguridad.
De acuerdo con los uniformados, se les ordenó su presencia en la zona durante 10 días como parte del plan “Caseta segura”, que implementa el gobierno federal para evitar que los puntos de cobro sean tomados por manifestantes.
Previo a los enfrentamientos, Vidulfo Rosales, abogado de los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, denunció que el pasado 28 de enero hubo hostigamiento y persecución por parte de los elementos de la Guardia Nacional en contra de los estudiantes de la normal rural.
El choque entre manifestantes y más de 250 elementos de la Guardia Nacional del pasado 4 de febrero dejó un saldo de, por lo menos, 35 personas lesionadas, 15 elementos antimotines y 20 estudiantes, de los cuáles tres fueron hospitalizados, uno de gravedad.
Las imágenes de los enfrentamientos recorrieron las redes sociales entre las que destacó el lanzamiento de un tráiler –sin conductor– en contra de los elementos de seguridad.
Durante las movilizaciones que se realizaron el sábado 6 de febrero, Rosales calificó como “peligroso”, que el gobierno intente contener la inconformidad social con policías. El abogado comparó al gobierno de Salgado Pineda con el del exgobernador Ángel Aguirre Rivero, al asegurar que ambas administraciones pretenden neutralizar las demandas de justicia de los padres de los 43.
De acuerdo con normalistas la toma de casetas forma parte de las actividades que llevan a cabo para recabar dinero y continuar con las jornadas de búsqueda y demandas de justicia que realizan padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa.
Rosales aseguró que en Guerrero hay falta de empatía con los 43 y que quieren neutralizarlos con base en un política respaldada por las fuerzas armadas, y agregó que seguirán movilizándose para exigir la presentación con vida de los desaparecidos.
No se debe reprimir a nadie: Félix Salgado, sobre enfrentamientos en casetas
Por su parte, el senador con licencia, Félix Salgado Macedonio señaló que el diálogo debe estar acompañado de soluciones y se manifestó en contra de la represión a través de una transmisión de Facebook.
“Tiene que haber diálogo y apoyo, es necesario que los gobiernos tengan la sensibilidad que todo aquel que hace una protesta tiene un origen fundamentado, y la protesta es justa y hay que acompañar con solución”, aseveró Salgado Macedonio y agregó, “no se puede reprimir, no se puede matar a ningún ciudadano, a nadie, mucho menos a estudiantes, profesores, campesinos, porque ellos son productivos”.
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