UNICEF pide que las instalaciones educativas sean un espacio seguro donde los niños y niñas puedan estar protegidos
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Más de 750 escuelas han sufrido daños desde el inicio del conflicto en el este de Ucrania, un día después de que el Ejército ucraniano acusara a los rebeldes de atacar una guardería en Lugansk, ha denunciado este viernes el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Según UNICEF, los ataques a guarderías y escuelas han sido una «triste realidad» para los niños del este de Ucrania durante los últimos ocho años, lo que ha interrumpido el acceso a la educación de miles de menores a ambos lados de la línea de contacto.
Por ello, la agencia de Naciones Unidas ha hecho un llamamiento a todas las partes para que respeten la Declaración sobre Escuelas Seguras y protejan a los niños y a sus cuidadores de los ataques, independientemente de las circunstancias en las que se encuentren.
«Las instalaciones educativas deben seguir siendo un espacio seguro donde los niños puedan estar protegidos de las amenazas y las crisis y un refugio en el que puedan aprender, jugar y desarrollar todo su potencial», ha señalado, remarcando que «el derecho de los niños a la educación no puede salvaguardarse en situaciones de conflicto si antes no se protege la educación».
Por otro lado, el conflicto ha causado estragos en el bienestar psicosocial de toda una generación de niños que crecen en el este del país. Además, estos niños viven en una de las zonas del mundo más contaminadas de minas antipersona. Todos los días viven, juegan, van y vienen de la escuela en zonas plagadas de estos artefactos, munición sin explotar y otros restos explosivos de guerra.
Desde el comienzo de la guerra, UNICEF ha estado sobre el terreno en todo el este de Ucrania, proporcionando ayuda psicosocial y educación sobre el riesgo de dichas minas a más de 180.000 niños, jóvenes y cuidadores. UNICEF, que ha garantizado con las comunidades afectadas para proporcionarles el apoyo humanitario necesario, también apoya la reparación de escuelas y guarderías dañadas, además de distribuir suministros de educación vitales, como kits de enseñanza, mobiliario y material deportivo.