Luego de los bombardeos de Rusia a siete ciudades, incluyendo Kiev, la capital de Ucrania, el presidente Volodymyr Zelensky, aseguró que rompió lazos diplomáticos con su homologó Vladimir Putin, y levantará las sanciones a todos los ciudadanos de Ucrania dispuestos a defender a su país.
Mediante su cuenta oficial de Twitter, Zelensky declaró que el Gobierno ucraniano levantará las sanciones a “todos los ciudadanos de Ucrania” dispuestos a defender a su país “con las armas en las manos”, uniéndose a las Unidades de Defensa Territorial.
“Daremos armas a cualquiera que quiera defender el país. Prepárate para apoyar a Ucrania en las plazas de nuestras ciudades”, publicó
Horas más tarde, el mandatario ucraniano señaló además que “Rusia atacó traidoramente nuestro estado por la mañana, como lo hizo la Alemania nazi en los años de la Segunda Guerra Mundial”.
“Al día de hoy, nuestros países se encuentran en lados diferentes de la historia mundial. Rusia se ha embarcado en el camino del mal, pero Ucrania se defiende”, agregó.
“Puede ser el inicio de una gran guerra en el continente europeo”
Antes de que comenzaran los ataques, el jueves en la madrugada, Zelensky había hecho otro discurso donde, además de dirigirse a su pueblo, envió un mensaje a los rusos en su propio idioma.
Zelensky primero habló en ucraniano y advirtió que una invasión rusa “puede ser el inicio de una gran guerra en el continente europeo”.
Dijo que buscó sin éxito hablar con el presidente ruso y que Moscú tiene casi 200 mil soldados y miles de vehículos de combate en la frontera entre ambos países.
“Hice una llamada telefónica al presidente de la Federación Rusa. Resultado: silencio. El silencio debería estar en el Donbás”, expuso Zelensky.