Un promedio de ocho homicidios dolosos al día se cometieron en Michoacán en lo que va 2022. El estado que gobierna Alfredo Ramírez Bedolla registró 234 incidentes en enero; 246 en febrero; y durante los primeros seis días de marzo acumula 43, para un total de 523 homicidios en 64 días, según datos de la Secretaria de Seguridad y Participación Ciudadana (SSPC).
En los dos primeros meses del año en curso, Michoacán registró un incremento de 47.24% en la violencia homicida con respecto a lo sucedido en 2021. De acuerdo con el Semáforo Delictivo, durante enero y febrero del año anterior se perpetraron 326 homicidios, 154 menos que en 2022.
Este 6 de marzo, (día en que se perpetraron 13 homicidios dolosos en la entidad), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó sobre el arribo de 300 elementos del Ejército mexicano a Uruapan. Los elementos de seguridad arribaron con el objetivo de reducir la incidencia delictiva, pues durante 2021, el municipio acumuló 689 homicidios dolosos, cerca del 30% del total en Michoacán durante ese mismo lapso.
Sin embargo, la incursión de las fuerzas federales, tanto de la Sedena como de la Guardia Nacional no han logrado bajar los índices de violencia en Michoacán, que en febrero se colocó como el estado con más homicidios dolosos a nivel nacional. Dicha violencia llegó a su punto cumbre el 14 de febrero, cuando se reportaron 23 homicidios dolosos en la entidad.
Por su parte, el gobernador del estado ha mantenido un discurso en el que sostiene que controlar el tema de seguridad en Michoacán puede tomarle a las autoridades todo su sexenio.
A pesar de que el Ejército recuperó la cabecera del municipio de Aguililla y 43 localidades más que habían sido ocupadas por nueve meses por el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el pasado 9 de febrero, las disputas entre los grupos criminales siguen generando hechos violentos, como lo ocurrido el 27 de febrero en la localidad de San José de Gracia, en donde las autoridades no han podido determinar el número preciso de víctimas.
