Fuentes gubernamentales insisten en que el plan de autonomía es la opción «más realista» pero debe ser mutuamente aceptable
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El Gobierno ha reivindicado el gesto hacia Marruecos que ha permitido cerrar la crisis diplomática asegurando que lo que se busca no es otra cosa que «proteger a los españoles» y que con un conflicto a las puertas de Europa cerrar este capítulo con el país vecino.
Según han explicado fuentes gubernamentales a Europa Press, el Gobierno no esperaba que la carta de Pedro Sánchez al rey Mohamed VI iba a tener el «efecto catárquico» que ha tenido y que ha llevado al país vecino a dar por zanjada la crisis y anunciar el inicio de una nueva etapa de la relación.
No obstante, reconocen que sabían que iban sobre seguro porque era algo que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, había venido trabajando desde hacía meses con su homólogo marroquí, Naser Burita, y de hecho ambos habían estado «cerca del acuerdo» en varias ocasiones.
En cuanto al contenido de la misma, subrayan que no es una carta sobre el Sáhara, sino sobre la relación entre los dos países e inciden en que aunque se haya manifestado que el plan de autonomía planteado por Marruecos en 2007 es «la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo», se sigue apostando por una «solución mutuamente aceptable y en el seno de la ONU».
EN LÍNEA CON GOBIERNOS ANTERIORES
Además, insisten en que al reconocer los «los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos en el marco de Naciones Unidas para encontrar una solución mutuamente aceptable», el Gobierno se hace eco de lo que en su día ya habían expresado los Ejecutivos de José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.
Por otra parte, como también ha hecho el ministro de Exteriores, las fuentes han esgrimido que en un contexto como el actual, con una guerra en las puertas de Europa, cerrar la crisis con el país vecino es algo positivo que no busca sino «proteger a los españoles» y garantizar «su seguridad y tranquilidad», algo que entienden bien en Canarias, Ceuta, Melilla o Andalucía.
En este sentido, las fuentes han sostenido que la obligación del Gobierno es con los españoles y con sus intereses y por tanto han descartado que deban preocuparse en primer lugar por cómo pueda verse su acción en otras partes, por ejemplo por parte de los saharauis. En esta misma línea, han descartado por tanto que esto pueda generar divisiones o diferencias en las filas de la coalición de Gobierno.
Con todo, y dado el malestar ya expresado por el Frente Polisario, que ha afeado al Gobierno haber cedido al «chantaje» de Marruecos, aseguran que el Ejecutivo va a hacer todo lo que esté en su mano para que se encuentre una solución al conflicto porque no pueden «estar otros 40 años más así» pero a día de hoy «lo más realista es el plan».