La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a través del Centro de Investigaciones Interdiciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH), realizó una transmisión en vivo a través de sus redes sociales con el foro ‘Aclaraciones necesarias sobre las categorías sexo y género’.
El foro estaba planeado para ser un espacio de reflexión e información de diversidad sexual y las ponencias programadas causaron gran indignación y polémica entre la comunidad universitaria expresándose con comentarios que fueron considerados transfobicos.
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La ponencia que causó el disgusto de los internautas fue la de Amelia Valcárcel, filósofa española cateradática de ‘‘filosofía moral y política’ en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), quien negó la existencia de identidades intersexuales y desacreditó el concepto de ‘géneros no binarios’. Asimismo, aseguró que la sexología no es una ciencia sino una doctrina enfocada en ‘una serie de especulaciones basadas en el psicoanálisis’.
También estuvo presente la experta en derecho interacional, Alda Facio, que hizo comentarios irritantes para la comunidad LGBT+, resaltando que las mujeres transgénero ‘estan borrando’ a las mujeres cisgénero ya que sus intereses se oponen a la lucha feminista.
‘No estamos en contra de que otros grupos humanos sean protegidos y se les elimine las discriminaciones pero no a costa de que se borre nuestra existencia’, dijo la abogada Facio, afirmando que la categoría de mujer en el mundo de los derechos humanos ‘se está tratando de borrar o eliminar’ considerándolo algo ‘peligroso’.
La abogada y ex estudiante de la UNAM, Marcela Lagarde, refuerza la misma narrativa transodiante asegurando que ‘un día despertamos, nos tomamos un café y se nos antoja cambiar de género para escapar de la justicia y el derecho’.
Tras las polémicas declaraciones, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México emitió un comunicado a través de su cuenta oficial de Twitter, aseverando que ‘los discursos de odio fomentan la desigualdad estructural y el sometimiento de determinados grupos desaventajados históricamente mediante expresiones de exclusión, violencia, burla, menosprecio o insulto’.
Por su parte, universitarios e internautas impulsaron el hashtag #UNAMsinTransfobia para obligar que se sigan dando espacios de reflexión de temas sobre intersexualidad y diversidad sexual dentro de la máxima casa de estudios de México, condenando las declaraciones transodiantes de las académicas invitadas al foro.
Calificaron a la UNAM de ‘hipócrita’ al recordar que durante el mes del orgullo LGBT+, adornan la biblioteca central de Ciudad Universitaria y le agregan la bandera al logo de la institución académica en sus redes sociales, permitiendo por otro lado espacios con discursos transodiantes para ‘desinformar’ sobre el tema como sucedió con el foro ‘Aclaraciones necesarias sobre las categorías sexo y género’.
El Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades hizo público un comunicado a través de su cuenta oficial de Twitter.
El Centro de Investigaciones y Estudios de Género emitió un comunicado público por la misma vía.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no ha emitido un posicionamiento institucional sobre lo acontecido en el foro y en redes sociales instan a la máxima casa de estudios a implementar medidas que hagan que la institución autónoma sea un lugar seguro y libre para todas y todos los universitarios.
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