ATENAS (AP) — Dos personas fueron detenidas como sospechosas de contrabando de migrantes y de poner en peligro a personas por manejar un velero con otras 68 personas, que se vio en problemas la semana pasada ante la costa occidental griega, según dijo el martes la guardia costera griega.
Los dos detenidos, un ciudadano iraquí y un sirio, comparecieron ante un fiscal en el sur de Grecia y permanecían detenidos a la espera de juicio.
El velero había salido de Turquía y se dirigía a Italia cuando se encontró en problemas cerca de la costa turca el pasado jueves, según los guardacostas. Las personas a bordo -52 hombres, nueve mujeres y nueve niños- procedían de Irán, Siria e Irak.
Las autoridades emprendieron una operación de búsqueda y rescate y el velero fue escoltado de forma segura el viernes por la tarde hasta el puerto de Pylos, en el suroeste de Grecia. A diferencia de la práctica habitual, en la que la guardia costera anuncia las operaciones de búsqueda y rescate cuando aún están en marcha, no confirmó el incidente hasta el martes, a pesar de que medios griegos reportaron sobre el incidente en ese momento.
Grecia está en una de las rutas más populares de inmigración a Europa para las personas que huyen de los conflictos y la pobreza en Oriente Medio, África y Asia. La mayoría salen de la costa turca hacia las islas griegas cercanas o intentan cruzar un río que separa los dos países en su frontera terrestre.
Pero Grecia ha adoptado una estrategia cada vez más dura, reforzado sus patrullas terrestres y marítimas y devuelto a personas que querían solicitar asilo. Organizaciones de derechos y migrantes han acusado en varias ocasiones a las autoridades griegas de hacer deportaciones sumarias ilegales en el mar y en tierra. El gobierno niega que se hayan producido, pese a los considerables indicios de lo contrario.
Ante esas medidas, algunas redes de contrabando han intentado evitar Grecia y utilizar barcos más grandes para rodear el país y navegar directamente a Italia.