MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Australia, Scott Morrison, quien todavía no ha hablado con su homólogo salomonense tras la firma del acuerdo de seguridad entre Pekín e Islas Salomón, ha asegurado que Canberra sigue siendo «el principal socio» del archipiélago.
El primer ministro de Islas Salomón, Mannasseh Sogavare, ha sugerido este martes que Australia y sus aliados estaban tratando deliberadamente de socavar su Gobierno –llegando a decir que podría haber una invasión– y también ha criticado la respuesta occidental a la invasión de Rusia y ha elogiado el trato de China a los cristianos.
Ante estas palabras del primer ministro salomonense, Morrison ha rechazado las preguntas sobre si se ha dañado la relación entre Australia e Islas Salomón y ha señalado que no ha hablado con Sogavare porque está siguiendo el consejo de las agencias de seguridad australianas, según ha recogido Bloomberg.
Morrison también ha negado la posibilidad de que Australia invada el archipiélago y ha señalado que Camberra envió a miembros de las fuerzas de seguridad durante los disturbios del año pasado a pedido de Sogavare. «Por supuesto que no hemos amenazado (con invadir)», ha dicho, agregando que son el «principal socio de seguridad» del archipiélago, según ha recogido la cadena ABC.
«Es por eso que la Policía Federal Australiana está ahora mismo sobre el terreno en Islas Salomón, asegurando la paz y la estabilidad tras los disturbios. Tenemos nuestra policía allí y las fuerzas de defensa en el terreno», ha indicado, según ha recogido la agencia de noticias Bloomberg.
Esta decisión de no hablar con Sogavare ha provocado malestar en la portavoz laborista de Asuntos Exteriores, Penny Wong, quien se ha mostrado sorprendida por el hecho de que Morrison no haya hablado con el mandatario de Islas Salomón tras la firma del polémico pacto de seguridad con Pekín.
Por otro lado, en declaraciones a ‘The Guardian’, la ministra de Nueva Zelanda, Nanaia Mahuta, ha señalado que la filtración del acuerdo es «un fracaso de la relación». «Sería de buenos modales y buen protocolo permitir que sus vecinos tengan una mayor conciencia y comprensión de sus preocupaciones sobre la seguridad regional antes de entablar relaciones fuera de la región», ha agregado.
Morrison advirtió de que la hipotética apertura de una base china en las Islas Salomón sería una «línea roja» para Canberra. Estados Unidos y Japón también han expresado su preocupación por el acuerdo y sus posibles derivadas.