La ONG acusó a la SSA de cometer asesinatos, detenciones arbitrarias de migrantes y torturas
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La milicia progubernamental libia Autoridad de Apoyo a la Estabilidad (SSA) ha rechazado las acusaciones de asesinatos y torturas vertidas por Amnistía Internacional y ha amenazado con presentar una demanda contra la organización no gubernamental por su último informe.
«El informe presentado por Amnistía Internacional carece del más mínimo criterio de trabajo profesional, que requiere que la citada organización se dirija formalmente al aparato de la SSA y a las instituciones de seguridad del Estado libio para responder cualquier pregunta o acusación antes de hacerlas públicas», ha dicho.
Así, la SSA ha subrayado que es parte de las instituciones oficiales y «cumple con la ley», antes de agregar que «todos los arrestados son presentados ante la Fiscalía según los informes de pruebas recabadas», tal y como ha recogido el diario ‘The Libya Observer’.
Por ello, la poderosa milicia libia, creada a través de un decreto gubernamental aprobado en enero de 2021 y liderada por Abdelghani al Kikli, alias ‘Gheniua’, ha afirmado que sopesa demandar a Amnistía Internacional por difamación al Estado de Libia y a sus instituciones de seguridad.
La ONG acusó el miércoles a este grupo de cometer asesinatos, detenciones arbitrarias de migrantes y torturas en la capital del país africano, Trípoli, y argumentó que «la impunidad arraigada ha envalentonado a la SSA».
En este sentido, afirmó que la SSA es responsable de «homicidios ilegítimos, detenciones arbitrarias, interceptación y posterior detención arbitraria de personas migrantes y refugiadas, tortura, trabajos forzados y otras violaciones terribles de Derechos Humanos y crímenes de Derecho Internacional».
«Legitimar a líderes de milicias que cometen abusos y ponerlos a sueldo del Estado sin hacer preguntas sólo los empodera para seguir pisoteando los derechos de más personas con total impunidad», afirmó la directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Próximo y Norte de África, Diana Eltahawy.
«Debería ser investigado y, si hay pruebas admisibles suficientes, procesado en un juicio justo», manifestó. La ONG aseguró además que escribió en abril a las autoridades libias para comunicar las denuncias recibidas contra Al Kikli y su antiguo ‘número dos’, Lofti al Harari, y reclamar su cese mientras se llevan a cabo investigaciones en torno a estas acusaciones, sin recibir respuesta.