El Servicio de Administración Tributaria (SAT) dejó escapar –al menos– 412 mil millones de pesos durante el último año, ante la evasión de impuestos que genera la economía informal, revelaron cifras oficiales y estudios de organismos públicos.
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El Centro de Estudios de las Finanzas Publicas de la Cámara de Diputados y la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) reportaron que la evasión del Impuesto Sobre la Renta (ISR) en México alcanza una tasa de 1.5% del Producto Interno Bruto (PIB).
Ello, evidenciaron, significa que –al menos– 1.5% de todo lo que genera la economía nacional está ubicado negocios, trabajadores y profesionistas que no pagan ISR; en personas que rentan locales o inmuebles sin enterar al fisco y en empresas que evaden a la autoridad.
Al aplicar dicho porcentaje al valor del PIB o riqueza económica el país del último año, reportada por el Inegi en 27 billones 469 mil millones de pesos, el costo fiscal de no pagar el ISR y, por lo tanto, de la informalidad alcanzó 412 mil 30 millones de pesos al cierre de 2021.
Para dimensionar el boquete que esto causa en las finanzas del SAT, basta decir que tal cantidad supera los 400 mil millones de pesos que la propia autoridad fiscal destinará a subsidiar el precio de la gasolina y evitar que siga encareciéndose durante este año.
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La cantidad en cuestión también serviría para financiar la construcción de cinco terminales aéreas, semejantes al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA); que –con un costo oficial de 74 mil millones de pesos– se convirtió en uno de los proyectos insignia del gobierno federal.
El presidente tiene otros datos
En contraste a las estimaciones de la Cámara de Diputados y la UDLAP, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la informalidad aporta muy poco al cobro de impuestos, en particular del ISR.
En su conferencia matutina de este miércoles, indicó que los gobiernos neoliberales, que antecedieron a la 4T, manejaron de forma “perversa” que los problemas fiscales en México estaban atados a la informalidad; mientras utilizaban el secreto bancario y fiscal para esconder que “los de mero arriba” no pagaban impuestos.
“Manejaron, durante mucho tiempo, los defensores del neoliberalismo que el problema fiscal de México era porque no pagaban impuestos los de la economía informal: los ambulantes, los acomodadores de carros, los viene viene.
“Sí, desde luego, hay que procurar que todos paguemos impuestos y dar facilidades para que haya economía formal, no informal (...) Pero cuánto se podía recaudar con la gente que sale a la calle a buscarse la vida, para mantener a su familia; ¿cuánto?, muy poco.
“¿En dónde estaba el problema de fondo? Lo que ocultaban, de manera hipócrita, es que en los de arriba, los de mero arriba, los de la punta del cerro, los de la punta de la pirámide no pagaban impuestos”, subrayó el presidente.
Tres preguntas a...
Ramón Martínez, especialistas en Economía y Finanzas de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC):
1. ¿Qué impacto genera el costo de la informalidad?
– El 1.5% del PIB en evasión fiscal, que reportan la Cámara de Diputados y la UDLAP, corresponde al impacto real de la informalidad; cuyas consecuencias limitan el crecimiento del país y hacen que 56% de la Población Económicamente Activa o trabajadores activos laboren sin seguridad social, sin servicios de salud, sin contratos y con bajos salarios.
2. ¿Qué impulsa a la informalidad?
– El bajo crecimiento económico, la falta de inversiones, el desempleo y la necesidad de generar ingresos para cubrir lo básico. La alta carga impositiva y la mala retribución fiscal en seguridad, educación y servicios públicos eficientes, también hace que los negocios, emprendedores y profesionistas recurran a la informalidad para mejorar sus ingresos.
3. ¿Qué mensaje envía el presidente cuando dice que no se puede recaudar mucho ‘con la gente que sale a la calle a ganarse la vida’?
– Esa es una visión maniquea de la informalidad, que se apoya en las necesidades de los más pobres; pero el presidente olvida que además de los ambulantes y del viene viene, hay profesionistas, personas con actividad empresarial, empresas formales y hasta entidades de gobierno que recurren a la informalidad para dejar de pagar ISR, IVA y otros impuestos.
