El fiscal de Chihuahua, Roberto Fierro Duarte, informó que el presidente municipal de Urique, así como la policía local están bajo investigación para determinar si brindaban protección a José Noriel Portillo Gil, “El Chueco”, quien está acusado del homicidio de los sacerdotes jesuitas Javier Campos, de 79 años, Joaquín Mora, de 80, así como al guía de turistas, Pedro Palma.
El fiscal dijo que el alcalde Daniel Silva Figueroa no se ha comunicado con las autoridades tras estos hechos, por lo que no se tiene la certeza si aún despacha en el ayuntamiento, informó Excélsior.
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Aunque no dio mayores detalles, dejó abierta la posibilidad de que las autoridades de Urique se hayan corrompido y trabajado en favor de la célula criminal encabezada por “El Chueco”, misma que acabo también con la vida de un jugador de beisbol que integraba un equipo que venció a otro que era patrocinado por el delincuente.
El pasado jueves, autoridades estatales, además de integrantes de la Guardia Nacional y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) localizaron con vida a Jesús Armando Berrelleza; sin embargo, su hermano fue privado de la vida.
“Como resultado de los operativos conjuntos implementados en la zona serrana, se logró localizar a los hermanos Berrelleza Rábago, quienes habían sido vistos por última vez el 20 de junio en la comunidad de Cerocahui, municipio de Urique”, informó la fiscalía estatal asedia.
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El joven localizado con vida se mantiene bajo resguardo de las autoridades, incluso fue integrado al programa de protección a testigos y recibe ayuda psicológica.
Además de que un testigo aportó la información necesaria para dar con el sitio en donde fue enterrado, de forma clandestina Paul Osvaldo Berrelleza, de 22 años, quien fue llevado a la instalaciones del Servicio Médico Forense.
