Este martes, la operadora Moody’s bajó la calificación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a “Baa2″ desde “Baa1″, cambiando también la perspectiva a “estable” desde “negativa”.
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Esta rebaja, se produce luego de que el pasado viernes 8 de julio, la agencia también recortara la calificación de México a Baa2 desde Baa1, pues considera que las “tendencias económicas y fiscales pueden continuar dañando el perfil crediticio” del país.
Por tal razón, Moody’s informó que esta reducción, que también afectó a Petróleos Mexicanos (PEMEX) que bajó a B1 desde Ba3, se produjo a raíz de la reducción de la calificación a México.
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“Estas acciones de calificación fueron provocadas por el anuncio de Moody’s el 8 de julio de 2022 que había rebajado sus calificaciones del Gobierno de México a Baa2 desde Baa1″, informó la operadora.
La agencia detalló que, a pesar de la degradación de la CFE, esta aún conserva el grado de inversión; sin embargo, prevee que su desempeño financiero independiente seguirá debilitado los próximos 18 a 24 meses en un panorama donde los precios de gas natural son altos a consecuencia de la guerra en Ucrania.
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Asimismo, la calificadora informó que, según sus proyecciones y debido a los altos precios del gas natural la CFE “podría presentar un flujo de efectivo negativo de sus operaciones. Esto, junto con el programa de capital sustancial, generaría requisitos de financiamiento más allá del monto original que tiene presupuestado para fines de año”, detalló.