Los estímulos fiscales a la gasolina, aplicados por la Secretaría de Hacienda para contener el precio del combustible, se convirtieron en un alivio en contra de la inflación o alza general de precios, señaló el BBVA México.
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El economista en jefe del grupo financiero, Carlos Serrano, señaló que dichos apoyos tendrán un costo importante de 500 mil millones de pesos durante 2022; que serán cubiertos con los excedentes petroleros –o ingresos extraordinarios– que el país obtendrá por el encarecimiento mundial del petróleo.
Precisó que los estímulos fiscales a la gasolina, aplicados a través de la condonación del 100% del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que pagan los consumidores, y la reducción de los impuestos a los gasolineros, consumirá tres cuartas partes de los excedentes petroleros.
Al presentar el Informe Situación México del tercer trimestre de 2022, el especialista indicó que este año país recibirá alrededor de 650 mil millones de pesos por los ingresos extraordinarios de petróleo y, de ese monto, Hacienda tomará 500 mil millones para cubrir lo que deja de recaudar por los estímulos fiscales a la gasolina.
Ello, refirió, implica que dicha política del gobierno federal se lleva 76% de los excedentes petroleros y apenas dejará 150 mil millones libres, que -en alguna medida- deberán ser integrados al Fondo de Estabilización de los ingresos Presupuestarios (FEIP).
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Carlos Serrano señaló que, por su alto costo y el mayor beneficio que otorgan a personas con más ingresos –que tienen coche y compran gasolina–, dichos apoyos fiscales son una medida regresiva, que no es viable a mediano o largo plazo.
¿Qué beneficios tienen los estímulos a la gasolina?
El economista principal del BBVA México, Javier Amador, explicó que los estímulos fiscales aplicados a la gasolina han tenido un impacto importante para contener el precio del energético durante los últimos cuatro meses.
Indicó que la condonación del IEPS a los consumidores y la reducción de la carga fiscal a las gasolineras permitieron absorber el encarecimiento de los combustibles; provocado por el alza mundial del petróleo, cuyo precio ronda los 100 dólares por barril.
El economista del grupo financiero refirió que tales medidas han recortado hasta dos puntos porcentuales a la tasa nacional de inflación; que en junio cerró en 7.99% y, que sin los estímulos, estaría por arriba de 10%.
“Los precios de la gasolina a nivel global, y en particular en Estados Unidos, tienen un ritmo de aumento anual de más de 50%, de casi 60%; en México es mucho menor y, de haberse dado –en nuestro país– ese aumento global en la gasolina, la incidencia sobre la inflación sería de más de dos puntos adicionales.
Es decir, la inflación en México en lugar de ser de 8%, estaría en torno a 10% sin este subsidio; entonces en el muy coto plazo este subsidio sí ha evitado que la inflación en México esté en un nivel significativamente mayor”, aunque con un efecto regresivo por su alto costo y beneficios a la población de mayor ingreso, concluyó el economista del BBVA.
Proyecciones económicas para México
A través del Informe Situación México, el BBVA reportó que, al cierre de 2022, la economía nacional manejará los siguientes indicadores:
- PIB: 2%, ocho décimas superior al 1.2% estimado hace tres meses.
- Inversión: 18%, como proporción del PIB; nueve puntos por debajo de 2019, antes de la pandemia.
- Creación de empleo: 712 mil puestos afiliados al IMSS; 60% de 1.2 millones que demanda la población cada año.
- Inflación: 7.7%, con un descenso paulatino que llevará a una tasa de 4.1% al final de 2023.
- Tasa de interés de Banco de México: 9.50%; 1.75 puntos arriba del nivel actual de 7.75%.
- Deuda pública total (interna y externa): 50.2% del PIB; dos décimas arriba respecto al cierre de 2021.
