El presidente de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM), Ernesto Zazueta, informó que una leona murió en las instalaciones del santuario Black Jaguar - White Tiger en el Ajusco, en la alcaldía Tlalpan de la Ciudad de México, situación que se dio porque no recibió la atención médica necesaria.
La muerte les fue notificada la noche del martes, en el sitio aún permanecen varios felinos porque las autoridades solo trasladaron a ocho de ellos y 14 monos al zoológico de Chapultepec, pero el predio se contabilizaron a 177 animales.
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“Como lo dimos a conocer desde un inicio, la mayoría de los 177 grandes felinos hallados en el lugar se encontraban en un estado de salud muy delicado y requerían, además de alimento y agua, atención médica especializada inmediata”, dijo Zazueta.
Hace 17 días al lugar acudieron inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) tras la denuncia penal, la que se interpuso el pasado 24 de junio en contra de la Fundación Black Jaguar por maltrato y abandono de fauna silvestre.
Sin embargo solo se autorizó el traslado de los monos y algunos grandes felinos, todos los demás quedaron resguardados en el predio y sin la ayuda de médicos para atenderlos de sus padecimientos con el riesgo de que algunos animales perdieran la vida, cosa que finalmente ocurrió este martes.
“Personal que tiene acceso al predio nos informó que el día de ayer falleció una leona. Estamos muy preocupados porque, como siempre lo hemos dicho y nos hemos quejado, los procesos legales y demás diligencias no pueden estar por encima de la vida, estamos ante una urgencia, una emergencia y se debe tratar como tal, es un caso de vida o muerte”.
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Ernesto Zazueta consideró que no es momento de buscar culpables, pero sí de autorizar el traslado de los demás animales a lugares, que tienen autorización, para que sean atendidos adecuadamente como ocurre con los ejemplares que fueron llevados al Zoológico de Chapultepec.
Añadió que el estado de salud de los animales es grave por los meses de maltrato que sufrieron por lo que su atención no puede posponerse, pues desde la fecha de la inspección no han recibido la atención médica que necesitan dichos animales silvestres.