LONDRES (AP) — La Organización Mundial de la Salud declaró el sábado que el brote de viruela símica, que se está extendiendo por más de 70 países, constituye una situación “extraordinaria” que ahora puede calificarse de emergencia global.
La resolución podría impulsar una mayor inversión en el tratamiento de la enfermedad, que antes era poco frecuente, y agudizar la lucha por las vacunas, que son escasas.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, tomó la decisión de emitir la declaración a pesar de la falta de consenso entre los miembros del comité de emergencia de la OMS. Fue la primera vez que el jefe de la agencia de salud de la ONU toma tal medida.