Todas las grandes construcciones como el Metro cada cierto tiempo se les debe dar mantenimiento, así como realizar distintos estudios para saber que no presentan fallas estructurales, afirmó el Ilustre Colegio Nacional de Ingenieros Arquitectos de México (ICNIAM).
Luego de que a través de redes sociales se volvió tendencias fotos y videos en el que usuarios alertan sobre estructuras desniveladas y grietas en la Línea B del Metro (principalmente del tramo de las estaciones San Lázaro a Deportivo Oceanía).
Para entender mejor: “No representa ningún riesgo”, asegura Metro CDMX tras video de la columna desnivelada en estación Romero Rubio
El ingeniero estructurista del ICNIAM, Luis Manuel Ortiz Acosta, dijo que estos desniveles, separaciones y grietas no comprometen la estabilidad de la estructura del Metro a corto plazo, pero que dentro de las construcciones de esta magnitud existen varios límites que se les conoce como estados límites de servicio o de falla.
Mencionó que cuando se realiza un proyecto ejecutivo se tiene que integrar un Manual de Mantenimiento preventivo, antes de que sea correctivamente, para poder determinar cada cierto tiempo que tipo de mantenimiento se le debe dar a la infraestructura, las instalaciones, las vías y a los trenes.
“Todas las estructuras, así como todo, requiere de mantenimiento, la infraestructura del Metro no es la excepción, más aún al ser un proyecto tan grande, necesita in manual y calendario de mantenimiento”, resaltó en entrevista para este medio.
De acuerdo con los reportes, en las estaciones del tramo elevado: Ricardo Flores Magón, Romero Rubio, Oceanía y Deportivo Oceanía, con dirección a Ciudad Azteca, el que se evidencia una separación de trabes.
El vocero del ICNIAM dijo que las separaciones que nosotros vemos a simple vista existen desde el momento en que se construyó, y se conocen como “juntas”, las cuales tiene como función estructural generar apoyos.
“Esas juntas siempre van a existir, el objetivo de la misma es que se genere un libre movimiento entre un elemento y otro de manera que sirvan para disipar la energía y no la absorba la misma estructura. Estas, desde su construcción están con ese sentido. Desde el proceso constructivo se van armando generalmente una sobre otra”, detalló el especialista.
Indicó que la unión que se tienen entre estos elementos regularmente se colocan capas de neopreno, pero que no tienen una función estructural.
“Normalmente sirven para disipar la energía y para que no exista un golpeteo entre un miembro y otro. Las fotos donde se muestran estas fisuras se han dado precisamente por esa fricción, por el desgaste del neopreno”, subrayó.
Piden al GCDMX dar mantenimiento al Metro
El ingeniero estructuralista Luis Manuel Ortiz pidió a la ciudadanía mantener la calma, aunque requirió a que sigan prestando atención a este tipo de cuestiones y exigir a las autoridades la transparencia en cuanto al mantenimiento que se le debe estar dando al Metro.
“Sabemos que ellos (Gobierno-STC-METRO) tienen sus protocolos de revisión, que tienen su grupo de expertos... En este caso, hablando de la infraestructura no sabemos si el mantenimiento que hicieron, lo hicieron de la manera más adecuada. Invito a la ciudadanía a que se acerquen a los colegios de profesionistas, donde contamos con expertos en ciertas áreas y los podemos orientar, donde podemos exigir, en conjunto con la ciudadanía ,que se realicen estos mantenimientos de la manera correcta”.
Línea B no representa daños estructurales: STC-Metro
El Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro respondió que la fotografía exhibida por usuarios en redes sociales, pertenece “al murete lateral del viaducto de intersección de las estaciones San Lázaro-Flores Magón, no forman parte de algún elemento estructural de carga, no implica riesgo y tampoco afecta el servicio”.
“En viaducto de la estación Oceanía de la Línea B no presenta daños en su estructura, personal de Protección Civil así como de Obras, realizan supervisiones periódicas. El servicio se ofrece con normalidad”, indicó al STC Metro a través de un masaje publicado en Twitter, acompaño con cuatro fotografías.
El director del STC, Guillermo Calderón aseguró que ya se hicieron las revisiones necesarias y se comprobó que la línea es “absolutamente segura”.
Sin embargo, la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum anunció que hará una visita al lugar y pedirá un dictamen y externo “para que podamos tener toda la certeza”.
La Línea B del Metro tiene una longitud de 23 kilómetros con 722 metros; de los cuales, 20 kilómetros están en servicio y el resto se utilizan para maniobras. En total cuenta con 21 estaciones, de las cuales cinco son de correspondencia, 14 de paso y dos son terminales.
La Línea B del Metro fue inaugurada el 15 de diciembre de 1999 en el tramo “Villa de Aragón-Buenavista” y el segundo tramo “Nezahualcóyotl-Ciudad Azteca” quedó abierta al público el 30 de noviembre del año 2000.
