MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El encuentro comenzó con el dominio con el balón del equipo local, aupado por el empuje de la afición para adjudicarse los primeros acercamientos con mñas peligro del encuentro. Álex Collado, tirado a a banda derecha, fue el absoluto protagonista del ataque de los ilicitanos. Sin embargo, el Almería estuvo muy bien plantado durante los primeros 15 minutos, sosteniendo, en cierta manera, los primeros envites del Elche.
La falta de acierto y efectividad la pagaron los locales en el minuto 22, cuando el delantero del equipo andaluz Umar Sadiq, que previamente había sufrid un golpe algo aparatoso en un lance con Enzo Roco, para adelantar a los de Rubi con un poderoso cabezazo en el segundo palo tras un saque de esquina. La pizarra del técnico catalán se impuso al entramado defensivo local para desatascar un partido que, hasta ese moemnto, era propiedad del Elche.
Los ilicitanos no se amilanaron tras el zarpazo del Almería, que solo creaba peligro desde los lanzamientos de córner gracias a su poderío aéreo. El Elche siguió fiando sus alternativas a Collado, motivado en su debut, que por fin encontró la recompensa tras el enésimo intento a pierna cambiada en la frontal del área.
El jugador formado en La Masía conectó un gran disparo con su pierna izquierda, ajustando el balón al palo corto de la portería defendida por Fernando, que no pudo hacer nada. El éxtasis que generó el tanto local no se tradujo en el segundo tanto, con un Almería que celebró la llegada del descanso.
En los segundos 45 minutos, el guion cambió. El dominio del Elche ya no fue tal, y la locura se impuso sobre el césped. Intercambio de golpes entre ambos equipos, con una doble ocasión para Roger Martí y Álex Collado, el más activo del partido, en un solo minuto cuando solo se jugaban dos de la segunda mitad. No tardó en llegar la respuesta del Almería, que diez minutos después la tuvo con un testarazo que no entró gracias a la intervención de Edgar Badía y el palo.
Pero el Elche seguía intentándolo y pudo poner el 2-1 con un testarazo de Tete Morente tras un precioso centro de Gumbau. Cuando corría el minuto 68, Francisco Rodríguez quiso dar un golpe de efecto al duelo dando entrada a Lucas Boyé en detrimento de Eze Ponce, con un Collado que se fue apagando con el paso de los minutos, después de que el Almería intensificara la vigilancia sobre el ex del Granada.
También sumó sus primeros minutos con el Almería Leo Baptistao, en un último cuarto de encuentro en el que siguieron cayendo las ocasiones, aunque ambos conjuntos empezaron a notar el cansancio, siendo conscientes de que un error se pagaría caro y podría hacerles perder el premio del empate en el Martínez Valero. Muchas idas y venidas, pero poco acierto. El miedo a la derrota reinó en los últimos minutos, teniendo en cuenta que serán, presumiblemente, dos rivales directos para mantener la categoría.