Al menos 5 expulsiones del Ejército en comunidades de Guerrero influenciadas por el narco

Entre enero y septiembre de 2022 elementos del Ejército mexicano han sido retenidos y expulsados de distintas comunidades de Guerrero en zonas que, se presume, controlan organizaciones del crimen organizado.

Las hechos más recientes ocurrieron en los municipios de Arcelia y Tlapehuala –zonas de influencia de la Familia Michoacana– donde los bloqueos de transportistas y la inconformidad de los habitantes terminó por echar a los militares; en contraste, presuntos sicarios del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) se dejan ver libremente en las fiestas patronales de Zirándaro.

Quechultenango

El 16 de febrero alrededor de 50 elementos del Ejército y la Guardia Nacional fueron retenidos por cerca de seis horas y expulsados por 200 habitantes de Quechultenango con la advertencia de que avisaran sobre los operativos que lleven a cabo en la zona. Cabe señalar que esta demarcación está identificada como uno de los bastiones del grupo criminal de Los Ardillos.

Marquelia

El 4 de mayo circuló un video en el que dos patrullas de la Marina fueron retenidas por los policías comunitarios de la Unión de Pueblos Originarios del Estado de Guerrero (UPOEG) sobre la carretera Acapulco- Pinotepa Nacional, en el municipio de Marquelia.

Según los reportes, los hechos ocurrieron luego de que los elementos de seguridad reprendieron a un integrante de las autodefensas de la UPOEG por usar uniformes camuflajeados de la Sedena. Acto seguido, los marinos fueron retenidos por los policías comunitarios y se necesitó que el presidente municipal de la demarcación, Casiano Clemente, interviniera para su liberación.

Un mes más tarde, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional (GN) intervinieron y terminaron enfrentándose con los policías comunitarios en Marquelia. Dicho choque habría provocado la muerte de una persona y la detención de otras ocho entre las que figura el comandante de la UPOEG, José Clemente Calleja, “El Chucho”.

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La detención de los miembros de la UPOEG – quienes según el gobierno federal tienen nexos con un brazo armado del Cártel de Sinaloa llamado Los Rusos– provocó que transportistas realizaran bloqueos en distintos puntos de Acapulco como Las Cruces, la Costera Miguel Alemán y el bulevar Lázaro Cárdenas, por lo que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero retiraron las unidades que bloquearon las vialidades

Luego de las manifestaciones el vicefiscal de Guerrero, Ramón Celaya, afirmó que las protestas en favor de los miembros de la UPOEG respondían a “intereses oscuros”. “Esto no es una protesta legítima, esto es un acto criminal de gente que pensando en intereses oscuros por la detención de comunitarios que cometieron delitos el día de ayer, en contra del Ejército mexicano, en contra de integrantes de la Guardia Nacional, pretenden una liberación que obviamente no se va a dar”, aseveró.

Petaquillas

El 7 de junio un convoy de tres vehículos militares fue retenido en la comunidad de Petaquillas en Chilpancingo por más de nueve horas por los pobladores y miembros del grupo de autodefensa local. Los habitantes les abrieron el paso a los elementos castrenses luego de que las autoridades firmaran un acuerdo en el que el Ejército se comprometió a no ingresar a la comunidad y a dejar libre el corredor Petaquillas-Quechultenango (zona de influencia de Los Ardillos y Los Rojos).

Una versión sobre los hechos señala que alrededor de las 11:00 horas, integrantes del Ejército agredieron a tiros a personas e incendiaron un inmueble, por lo que los miembros de la comunidad decidieron retener a los militares.

Otra versión indica que sujetos armados agredieron a los pobladores y le prendieron fuego a dos vehículos, por lo que los estos decidieron retener a los elementos castrenses para exigir la autorización del gobierno para instalar un módulo de autodefensas en el fraccionamiento Virreyes.

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Minutos después de las 21:00 horas del 7 de junio se abrió paso al convoy del Ejército, 30 militares y funcionarios del gobierno de Guerrero para que se fueran del poblado. Al iniciar la retirada de los retenidos y los cerca de 400 policías estatales y elementos de la Guardia Nacional que arribaron al lugar como refuerzo; decenas de personas comenzaron a insultarlos y a arrojarles palos y piedras.

Arcelia

El 10 de septiembre un grupo de habitantes y transportistas de la localidad de Arcelia expulsaron a militares del 41 batallón de infantería con base en Teloloapan. De acuerdo con las versiones de lo ocurrido vertidas en medios locales y redes sociales, los elementos castrenses mantenían un campamento de operaciones en la comunidad. Sin embargo, fueron echados a gritos por los pobladores.

Otras versiones de lo ocurrido apuntan a que los elementos castrenses fueron expulsados de la comunidad porque es una región controlada por el grupo criminal de la Familia Michoacana, liderados por los hermanos Jhonny y José Alfredo Hurtado Olascoaga.

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Tlapehuala

De acuerdo con reportes de medios locales, en la comunidad de San Juan Mina, en el municipio de Tlapehuala (región donde opera La Familia Michoacana), militares cedieron ante las presiones de 60 transportistas y pobladores que realizaron un bloqueo para que abandonaran el centro de salud de la localidad, mismo que ocuparon entre las 15:00 y las 16:30 horas del 12 de septiembre.