Un censo mal elaborado, corrupción, cambio de administración, vacíos legales, pandemia de Covid-19 e inflación, son factores que han ‘puesto el pie’ a la reconstrucción en la Ciudad de México y, por los cuales, se prevé que la conclusión de la reparación de daños concluya el último año de gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, esto, si no se presenta un nuevo sismo que termine por sumar más viviendas dañadas, en un 19S que parece ‘maldito’, pues al menos este lunes repitió la historia.
De las 22 mil 187 viviendas que resultaron dañadas tras el sismo del 19 de septiembre de 2017 y que están registradas en el censo de la Comisión para la Reconstrucción, 12 mil 773 han sido entregadas, es decir, todavía hay un faltante de nueve mil 414, por lo que se puede decir que casi 43% de los damnificados aún no han regresado a su hogar y aún les falta parte del ‘viacrucis’ por recorrer.
Según declaraciones de la comisionada para la Reconstrucción de la Ciudad de México, Jabnely Maldonado Meza, el trabajo ha sido complejo en la capital los últimos años por cuestiones externas como el Covid-19 y la guerra Rusia-Ucrania que ha derivado en una crisis inflacionaria.
“Nadie esperábamos la pandemia, nadie esperábamos un conflicto internacional ni esta inflación que hemos tenido en el acero, por ejemplo, pues ha subido más de 10 veces su costo, poco más del 130% y aquí nos hemos enfrentado pues obviamente ante este desafío”
— - aseveró.
Aunque en las primeras estimaciones se preveía que la reconstrucción en la ciudad terminaría en 2022, poco a poco se extendió hasta 2023 y ahora el cálculo es terminar hasta los primeros meses de 2024, esto último, según palabras de la propia comisionada.
En el caso de las viviendas unifamiliares -casas- indicó que se prevé terminar a principios de 2023, sin embargo, lo que se desplazará más será el tema de los edificios ‘porque su proceso constructivo es mucho más tardado, por la dimensión’.
Trabas en la reconstrucción
La reconstrucción en la CDMX inició mal y con el mayor de los problemas, con un diagnostico incompleto -en la administración pasada- de los daños que dejó el 19S en la capital del país. Hasta octubre de 2018 se informó que existían únicamente siete mil 021 inmuebles de tipo habitacional afectados en esta entidad.
En el cambio de gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo -quien está actualmente a cargo de la ciudad- dio cuenta de que faltaban damnificados por contabilizar. Tras el diagnóstico, la cifra se disparó a más de 22 mil.
Con la llegada de Sheinbaum al gobierno local salió a la luz el avance dispar en los procesos de reconstrucción de viviendas y los apoyos desiguales a personas damnificadas, pues mientras a algunos se les apoyó con recursos a fondo perdido, otros repararon su vivienda con recursos propios o a través de créditos.
Por todos los vacíos legales, se abrogó la Ley para la Reconstrucción, Recuperación y Transformación de la Ciudad de México y se impulsó la Ley para la Reconstrucción aprobada el 6 de diciembre de 2018 y publicada el 7 de diciembre del mismo año en la Gaceta Oficial de esta entidad.
Sobrecostos y malas prácticas
La corrupción es algo que ha mermado los trabajos de reconstrucción en la capital. En la entrega pasada de este reportaje hablamos sobre la fuga de recursos por parte de las constructoras, sin embargo, las malas prácticas también han tenido origen en la propia autoridad.
La comisionada Jabnely Maldonado habla de sobrecostos de hasta siete veces en demoliciones que se detectaron cuando llegó a la dependencia que actualmente representa. Señala que la Comisión anterior pagaba el metro cuadrado demolido en más de tres mil pesos, cuando actualmente se eroga un recurso de 520 pesos para el mismo objetivo. Además, cuestiona el mecanismo de cómo y cuánto asignaban a cada proyecto para la rehabilitación de viviendas.
“Yo desconozco el mecanismo de cómo asignaban que cada edificio necesitaba tanto […] está el antecedente de haber destinado recursos y aprobarlos sin pasar por revisión”
— - aseveró en entrevista para Publimetro.
Rébsamen, el claro ejemplo de corrupción
El colapso de un centro educativo construido con irregularidades en su edificación y documentación, ubicado al sur de la Ciudad de México, fue el sello de la corrupción de aquel sismo del 2017. Bajo los escombros de dicho predio quedaron 19 niños y siete adultos.
Actualmente, el terreno sigue vacío y bajo un proceso legal luego de las sentencias condenatorias contra Mónica García Villegas, ‘Miss Moni’ y el DRO Juan Mario Velarde Gámez, por su participación en los hechos.
José Carlos Montero Hernández, damnificado de Hacienda de la Escalera 74, en Tlalpan, cuya hermana estudiaba en el Colegio Rébsamen, asegura que Mónica Villegas dio una sorpresa en el sismo, puesto que antes de ello destacaba por ser ‘una señora muy recta, estricta y con reglas muy claras en la escuela’.
“De repente enterarte que hubo malos manejos en las construcciones de la escuela fue decepcionante, un sentimiento de incredulidad. Yo hablé con ella después del terremoto antes de que saliera todo este tema y de que se tuviera que esconder y era muy amable; de pronto cambia todo el panorama y no lo puedes creer”
— - refirió.
Aseguró que el caso del Rébsamen es un reflejo de lo que ocurre con la reconstrucción en la ciudad, ‘puesto que la corrupción abunda y hace que no pueda terminar el sufrimiento para las personas’.
En su caso le fue entregado un edificio que ‘parece que lo terminaron a marchas forzadas’, pues si bien quedó bien reforzado con paredes que duplicaron su dimensión, los detalles son los que sacan a la luz la prisa por terminar las obras, con paredes descuadradas y la eliminación de ciertas áreas, como balcones, además de que todo el espacio se redujo.
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