MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
Khairy ha explicado que es muy arriesgado celebrar elecciones durante la temporada de lluvias, no ya solo por las inundaciones que suelen producirse, sino también por el aumento de enfermedades que se transmiten por el agua, por lo que deberían celebrarse antes o bien después, cuenta el diario malasio 'The Edge'.
El pasado 17 de septiembre, el primer ministro de Malasia, Ismail Sabri Yaakob, cedió a las cada vez más acuciantes presiones de una parte de su partido y anunció la intención de anticipar elecciones, previstas en un primer momento para septiembre de 2023. La decisión final, añadió, se conocería el próximo 30 de septiembre tras una reunión de la UMNO.
"La opinión del Ministerio de Salud es que no es propicio celebrar unas elecciones durante la temporada de inundaciones", ha comentado Khairy. La época de lluvias en el noroeste de Malasia suele darse generalmente desde noviembre a marzo.
En el plano logístico, Khairy ha explicado que "se necesitaría bastante mano de obra" para organizar de manera eficiente unas elecciones, al igual que si se quiere manejar de la mejor manera los desastres que suelen traer consigo las precipitaciones en esa época del año.
"También se necesitarían muchas manos en temporada del monzón para manejar los centros de evacuación temporal y para cuidar la seguridad de las personas", ha puntualizado el ministro, quien ha señalado que si bien la fecha está siendo consensuada por todo el Gobierno, la última palabra la tiene el primer ministro.
La reticencia de Khairy es parte de la ya expresada por la oposición y otros gobernantes de la UMNO, que tienen en cuenta las decenas de muertos y los miles de desplazados que se dieron el año pasado por unas inundaciones que dejaron daños valorados en más de 6.000 millones de ringgit (más de 1.300 millones de euros).