MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Así, los principales altos cargos del país han sido sustituidos por nuevas figuras, un movimiento que los detractores de la junta ven como una decisión desesperada ante el fracaso de las últimas operaciones militares llevadas a cabo en varias zonas del país.
Asimismo, organizaciones de defensa de los Derechos Humanos han alertado de que los nuevos altos cargos son personas cercanas al líder de la junta, el general Min Aung Hlaing, según informaciones del diario 'The Irrawaddy'.
Así, Jin Yi, general de brigada y exjefe de la Policía birmana, se ha convertido en el nuevo secretario general del citado partido, rama política de la junta, una reforma relevante de cara a la posible celebración de elecciones en 2023. El jefe de la junta necesita el apoyo de la formación para cumplir su objetivo y convertirse en el presidente del país.
Según la Constitución de 2008, Min Aung Hlaing debe celebrar elecciones generales el próximo año una vez expire el mandato de emergencia. La votación podría facilitar que el actual jefe de la junta se haga con legitimidad al ser nombrado presidente electo de Birmania.
La actual Carta Magna establece un límite de dos mandatos para el presidente del país, por lo que podría ocupar el cargo durante una década. No obstante, la junta ha recalcado en anteriores ocasiones su intención de realizar unos comicios bajo un sistema de representación proporcional y no uno mayoritorio uninominal.
Asimismo, los militares han alertado de que la celebración de los comicios depende de la situación de seguridad en un país, donde el Ejército sigue enzarzado, un año después del golpe de Estado, en combates contra grupos armados étnicos y autoproclamadas organizaciones de resistencia popular en varios puntos del país.