JERUSALÉN (AP) — Soldados israelíes dispararon y mataron a dos palestinos el sábado en un tiroteo durante una redada militar en Cisjordania, según israelíes y palestinos, en la última confrontación que ha hecho que 2022 sea el año más letal en el territorio ocupado desde 2015.
El operativo se llevó a cabo en el campo de refugiados de Yenín, en el norte de Cisjordania, escenario de repetidos enfrentamientos entre las fuerzas armadas israelíes y pistoleros y residentes. El campo es un conocido bastión de la insurgencia palestina y el ejército suele allanarlo.
De acuerdo con los funcionarios palestinos, los soldados entraron al campo en la madrugada del sábado y rodearon una vivienda. En videos publicados en redes sociales se podían escuchar intercambios de disparos. El Ministerio de Salud palestino reportó dos fallecidos y 11 heridos, tres de ellos en estado crítico. Según la agencia noticiosa oficial Wafa, los dos muertos tenían 17 años.
El ejército israelí, por su parte, dijo que arrestó a un militante del grupo insurgente Yihad Islámica de 25 años que ya había estado preso en Israel. Además, estuvo implicado en balaceras recientes contra soldados, añadió.
Durante el operativo, los soldados abrieron fuego cuando docenas de palestinos lanzaron explosivos y dispararon, señalaron las autoridades israelíes. “Se identificaron los objetivos”, indicó la nota, que no ofreció más detalles.
Poco antes del mediodía, las fuerzas israelíes parecieron retirarse de la zona.
El incidente se produjo un día después de que dos adolescentes palestinos, de 14 y 17 años, murieron por fuego israelí en incidentes separados en la Cisjordania ocupada. Los grupos de derechos acusan a Israel de uso excesivo de la fuerza en su trato a los palestinos, sin rendir cuentas ante nadie. El ejército, por su parte, dice que solo abre fuego en situaciones peligrosas.
Israel opera en todo el territorio palestino, especialmente en el norte, desde una serie de ataques letales registrados por todo el país la pasada primavera. Algunas de esas agresiones fueron perpetradas por asaltantes palestinos de la zona.
Las autoridades israelíes dicen que se ven obligadas a tomar medidas porque las fuerzas de seguridad palestinas, que se coordinan con el ejército en una tensa alianza contra la insurgencia islamista, no pueden o no quieren reprimirlos. Por su parte, las fuerzas palestinas sostienen que los cateos militares han socavado su credibilidad y respaldo público, especialmente ante la ausencia de un proceso político. La última ronda de conversaciones de paz sustanciales entre israelíes y palestinos terminó en 2009.
Según Israel, la mayoría de los fallecidos son insurgentes. Pero en estos choques han muerto también jóvenes locales que protestaban contra las incursiones, así como otros civiles. Cientos han sido detenidos y muchos quedaron bajo la llamada detención administrativa, que permite que Israel los retenga sin juicio ni cargos. Más de 100 palestinos perdieron la vida en este tipo de enfrentamientos en lo que va de año.
La violencia se ve alimentada por la creciente desilusión y el enfado de los jóvenes ante la estrecha coordinación de seguridad entre Israel y la Autoridad Palestina, que cuenta con el respaldo de la comunidad internacional, que colaboran para detener la insurgencia.
Israel capturó Cisjordania en la Guerra de los Seis Días de 1967. En la actualidad, unos 500.000 colonos judíos viven en 130 asentamientos y puestos avanzados entre casi tres millones de palestinos, que quieren el territorio, además de Jerusalén Este y a Franja de Gaza, para su futuro estado.
