DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — Un incendio en la conocida prisión iraní de Evin causó daños en uno de los edificios más grandes del complejo, según imágenes por satélite analizadas el lunes, mientras las autoridades subían a al menos ocho presos la cifra de muertos en el incidente.
Todavía no estaba claro qué había ocurrido el sábado por la noche en la prisión, donde hay tanto presos con cargos penales como prisioneros políticos retenidos por las distintas agencias de inteligencia del país. Sin embargo, videos publicados en internet mostraban escenas caóticas en las que se oía una sirena y se veían llamas en el complejo, mientras parecían sonar disparos y gente gritando “¡muerte al dictador!".
El fuego se produjo mientras comenzaba la quinta semana de protestas contra el gobierno en todo el país, desencadenadas por la muerte de una joven detenida por la policía iraní de la moral.
Las tensiones en Irán han alcanzado un calibre inédito desde las marchas masivas del Movimiento Verde de 2009. Un incendio en uno de los recintos más vigilados de Teherán podría subir las apuestas para los que seguían protestando contra el gobierno y contra la imposición de que las mujeres lleven hiyab, un pañuelo que cubre el cabello, tras la muerte de Mahsa Amini.
Imágenes por satélite tomadas el domingo por Planet Labs PBC y analizadas por The Associated Press mostraban parte de un tejado quemado en un gran edificio que forma parte de la sección norte del penal de Evin.
El Atlas de Prisiones de Irán, un proyecto del grupo de derechos con sede en California Unidos por Irán que recopila datos de prisiones y presos iraníes, había identificado esa estructura como un módulo que aloja a presos condenados por fraude y robo, no por motivos políticos. Sin embargo, la organización ha advertido que las dependencias han cambiado durante los años.
Uno de los lugares afectados era el Módulo 8, según indicó el lunes el diario reformista Etemad , que citó a Mostafa Nili, abogado de algunos presos políticos en Evin. El abogado dijo que allí se retenía a prisioneros políticos con condenas judiciales y otras personas condenadas por delitos financieros.
También dijo que los presos políticos en el módulo 4 habían inhalado gas lacrimógeno durante el episodio. La agencia semioficial de noticias Tasnim también informó de daños en los módulos 6 y 7. La televisora estatal iraní llevó a un equipo con cámara al lugar el domingo por la mañana y grabó a un reportero caminando por una zona donde los presos dormían en literas mientras los bomberos rociaban agua sobre las brasas. La televisora dijo que el fuego se había producido en un taller de costura.
Ocho personas murieron en el incendio, según la judicatura iraní.
Las autoridades han atribuido las llamas a “alborotadores”, aunque no han descrito las medidas tomadas contra los reos. Imágenes del incendio parecen mostrar gente en el tejado del edificio que arroja líquido sobre las llamas. En otros videos parecen escucharse disparos y una explosión.
Conforme se extendían las llamas, uno de los videos recoge gente que grita “¡muerte al dictador!". Ese lema contra el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, se ha vuelto habitual por la noche en Teherán durante las protestas, aunque pronunciarlo supone un riesgo de ser condenado a muerte en una Corte Revolucionaria que celebra sus juicios a puerta cerrada.
Las protestas estallaron ante la indignación pública por la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, cuando estaba bajo custodia policial. La mujer fue detenida por la policía iraní de la moral por violar el estricto código de vestuario del país. El gobierno de Irán insiste en que Amini no fue maltratada, pero su familia dice que su cuerpo mostraba magulladuras y otros signos de golpes tras su detención.
La prisión de Evin alberga reos que enfrentan cargos de seguridad, incluidos algunos con doble nacionalidad, y ha sido acusada por grupos de derechos de maltratar a los presos. El centro también es conocido desde hace años porque retiene a prisioneros políticos y personas vinculadas con Occidente que han sido utilizadas como moneda de cambio por el gobierno iraní en negociaciones internacionales.