El periodismo en contextos autoritarios y populistas de Latinoamérica es una misión de alto riesgo que, en la mayoría de los casos, se ejerce de forma independiente y desde el exilio; sin embargo, periodistas de distintas latitudes consideran a su oficio y profesión como algo fundamental para la toma de decisiones en los regímenes democráticos.
En el marco del Foro Internacional, “Periodismo e integridad electoral”, organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE), periodistas de Cuba, Nicaragua y Venezuela narraron cómo es el ejercicio periodístico en contextos antidemocráticos.
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“El periodismo es una de las últimas trincheras de la democracia”, sostuvo Cindy Regidor, periodista nicaragüense exiliada en Costa Rica, quien resaltó la importancia de generar audiencias conscientes que valoren y sostengan la labor periodística.
La también corresponsal de France 24, relató que durante el gobierno de Daniel Ortega en su país se está borrando el papel de las organizaciones de la sociedad civil y no hay espacio para la disidencia, pues el Estado tiene un control absoluto y en los últimos cuatro años, pues se han cancelado más de 2 mil 500 organizaciones de la sociedad civil y se contabilizan más de 200 presos políticos.
“En la propaganda oficial de Nicaragua hay una subversión de todos estos términos, es realmente cansado e indignante ver a la vicepresidenta Rosario Murillo, que dirige la comunicación, corrompiendo todos estos términos de paz, derechos humanos, los crímenes de lesa humanidad de los que están acusados como gobierno por la represión de 2018″, refirió Regidor.
En Venezuela quedan 20 periódicos
El periodista venezolano Víctor Amaya señaló que los mayores retos para el periodismo en régimenes autoritarios es hacer rentable a los medios independientes; además de crear una narrativa real que no solo exponga la propaganda oficial, pues “los autoritarismos aprenden unos de otros con mecanismos de propaganda”.
El fundador de la plataforma de fact-checking Espaja.com, indicó que el periodismo independiente es de los pocos resquicios para obtener información de calidad en Venezuela. Amaya detalló que en la última década en su país pasaron de tener 200 periódicos a solo 20, que se adhieren a la propaganda gubernamental. Mientras que en lo que va de 2022, el régimen de Nicolás Maduro ha cerrado 100 estaciones de radio.
En Cuba asesinaron al periodismo
La cubana Yoani Sánchez afirmó que la democracia se deteriora con el autoritarismo y que aunque en su país no se asesinan periodistas, “el periodismo en Cuba ha sido asesinado”, pues históricamente los regímenes castristas controlaron -y siguen controlando- todos los espacios, eliminando cualquier posible crítica, hostigando, persiguiendo y condenado al exilio a quiénes ejercen esta labor.
No obstante, la periodista aclaró que las plataformas digitales abrieron nuevas posibilidades y después de 2003, ocurrió una “gran explosión” de blogs; así como de usuarios de Twitter, donde periodistas y también ciudadanos han podido narrar “la Cuba profunda”.
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Por su parte, el periodista argentino, Diego Fonseca advirtió que Cuba, Nicaragua y Venezuela no serán los únicos casos que se verán en Latinoamérica, pues también existen “ficciones democráticas” en otros gobiernos de corte populista en la región.
“Hay experiencias de populismo que no llegan a dictaduras sin cortapisa y se crean bajo la fachada de la ficción democrática, son los llamados autoritarismos competitivos como en el caso de Nayib Bukele, Presidente de El Salvador”, sostuvo.
