MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Así lo ha confirmado en un comunicado el Ministerio de Salud de Perú, que ha detallado que del total de víctimas, siete han fallecido en el departamento de Ayacucho y dos en La Libertad.
La Dirección Regional de Salud de Ayacucho ha informado de que siete personas han muerto y otras 52 personas han resultado heridas en enfrentamientos contra las fuerzas de seguridad cuando trataban de invadir el Aeropuerto Nacional Alfredo Mendívil Duarte, en el centro de Perú.
"Se movilizan ambulancias del Centro de Salud de Santa Elena, Samu, Bomberos del Perú y brigadistas de salud para las primeras atenciones y traslado a los establecimientos de salud más cercanos", ha detallado la dirección de salud de Ayacucho.
También ha informado de que los heridos están siendo atendidos en el Centro de Salud de Conchopata y en el Hospital Regional de Ayacucho, según ha recogido 'Diario Correo'.
En este sentido, las autoridades del país han invocado a la población a la calma y a respetar la labor del personal sanitario, alegando que su única misión es "salvar vidas sin distinción alguna".
Las otras dos muertes en la jornada de este jueves han tenido lugar en el departamento de La Libertad, también durante las protestas contra el Gobierno de Perú, si bien no ha trascendido en qué condiciones.
Las últimas muertes tienen lugar en medio de las fuertes protestas que están sucumbiendo en todo Perú tras la destitución y detención del expresidente Pedro Castillo el pasado 7 de diciembre. Los manifestantes piden a la nueva presidenta del país, Dina Boluarte, la disolución del Congreso y la convocatoria de nuevas elecciones generales.
El Gobierno peruano ha decretado el estado de emergencia a nivel nacional durante un periodo de 30 días como medida de respuesta a las protestas en apoyo al expresidente Pedro Castillo.
Asimismo, el Ejecutivo ha declarado la emergencia en la Red Vial Nacional, permitiendo que el Ejército salga a las calles en un esfuerzo por proteger los puntos estratégicos del país, entre ellos aeropuertos, centrales hidroeléctricas y otras infraestructuras clave, como las carreteras.