Este fin de semana las nevadas llegaron a la República Mexicana, cubriendo con pequeños copos de nieve diversas alcaldías de la Ciudad de México (CDMX) y las zonas altas del Estado de México (Edomex), debido a la Onda Gélida y el Frente Frío que entraron al territorio.
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¿Qué es una nevada?
De acuerdo con la Comisión del Agua del Estado de México (Caem-Edomex), las nevadas también son conocidas como tormentas de nieve que se desarrollan debido a las aglomeraciones de cristales de hielo que se forman cuando el vapor de agua se condensa a una temperatura más baja a la solidificación.
Este fenómeno congela las gotas de vapor de agua que chocan entre ellas creando pequeños cristales o copos de nieve que también pueden caer en forma de aguanieve, como ocurrió en las alcaldías Milpa Alta, Tlalpan, Cuajimalpa y Magdalena Contreras, y el Nevado de Toluca.
¿Cómo se forman las tormentas de nieve?
Estas nevadas se forman en un pequeño ciclo que depende de tres factores, el aire frío en la superficie, gran cantidad de humedad y aire caliente que se eleve por encima del aire frío; según Biopedia, están acompañadas de vientos fuertes e intensos.
En primera instancia, la Caem-Edomex asegura que el aire caliente y húmedo sube para formar las nubes, después el vapor se condensa a temperaturas menores a cero grados centígrados formando los cristales de nieve.
Posteriormente estos cristales crecen con diferentes formas y tamaños, aunque lo más común es que lo hagan de manera hexagonal, y al caer se van adhiriendo entre ellos formando finalmente los copos de nieve que acumulan una capa blanca en los suelos.
¿Por que la nieve es blanca?
De acuerdo con Biopedia, este peculiar color en la nieve es causado por el reflejo de los rayos de luz blanca, ya que los cristales de agua congelada no absorben la luz, impidiendo que esta brille.
Cuando los rayos de luz entran a la nieve, se reflejan dispersándose rápidamente entre el aire y los cristales de hielo, provocando que la mayor parte de la luz rebote, logrando una apariencia de color blanco.
Como el aire está compuesto por moléculas de oxígeno, nitrógeno y gases nobles, así como partículas como polvo, gotas, cristales de agua y sal, que, de acuerdo con RTVE noticias, dispersan la luz en un color en concreto, dependiendo de sus particularidades.
Sin embargo, el aire que queda entre los cristales o copos de nieve tiene tan poco espacio que sus condiciones dispersan los colores con la selección cromática de sus elementos, ocasionando que el ojo humano los perciba en color blanco, ya que este solo puede ver la mezcla de la luz blanca.