Un medio hermano del extinto operador del Cártel de Sinaloa, Ignacio “Nacho” Páez, privado de la vida el año 2020, también fue ultimado la tarde del 3 de enero, al Norte de Hermosillo. La Fiscalía de Sonora informó que Trinidad Páez, de 74 años, originario de Culiacán, Sinaloa, murió en ataque directo por proyectiles de arma de fuego.
Te puede interesar: Dan 20 años de cárcel a “El Nacho Páez”, socio del “El Chapo”
Se informó que Trinidad Paez murió en el asiento del copiloto de un vehículo Sentra color blanco.
En el lugar, resultó lesionada su esposa, de 54 años, originaria de Trincheras, Sonora, quien recibe atención médica. El ataque armado contra el matrimonio residente del municipio de Caborca, ocurrió a la entrada de Banus Residencial. La Fiscalía de Sonora informó que inició las investigaciones, con integrantes de la Mesa Estatal de Seguridad, para dar con los responsables.
“Nacho” Paez, el medio hermano
Ignacio “Nacho” Páez Soto, presunto socio de Joaquín “El Chapo” Guzmán y jefe de la plaza en los municipios del desierto de Sonora, fue ejecutado afuera de una tienda de conveniencia en el centro de Caborca. Poco después de las 13:00 horas del sábado 26 de diciembre del 2020, hombres armados lo acribillaron cuando estaba en un vehículo estacionado afuera de un establecimiento ubicado en la calle 10 entre L y M.
“Nacho Páez” o “C1″, quedó tirado bajo un automóvil color blanco, de la línea Passat, tras ser atacado cuando esperaba a una mujer y una bebé de 8 meses de edad que se encontraban dentro de la tienda. En el tiroteo, la menor también resultó lesionada en uno de sus brazos por impacto de arma de fuego, por lo que fue trasladada a un hospital por paramédicos de la Cruz Roja.
El presunto líder criminal del Cártel de Sinaloa en los municipios sonorenses de Caborca, Pitiquito, Altar y Sásabe, entre otros, en el 2016, había sido sentenciado por el Juzgado Tercero de Distrito, con sede en la ciudad de Hermosillo, Sonora, a 20 años de prisión por delitos contra la salud relacionados con el trasiego de drogas a los Estados Unidos.
Su captura ocurrió en octubre de 2013 por elementos de la Policía Federal durante un operativo en el poblado de Pitiquito Sonora, donde le fueron aseguradas armas de fuego y droga. “Nacho” Paez murió tras recibir más de 50 impactos de bala; su cuerpo fue trasladado por personal de Servicios Médicos Forenses (Semefo).
