El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) mostró su molestia por el aumento de la violencia entre israelíes y palestinos y destacó de que “los niños siguen pagando el precio más alto”, tras la muerte de siete menores palestinos y uno israelí en lo que va de año.
“UNICEF está alarmada por la última escalada de violencia que ha dejado muchos niños heridos en Palestina e Israel. Todos los niños y niñas tienen derecho a una protección especial en virtud de la legislación internacional de los Derechos Humanos, y todos sus derechos, incluido el derecho a la vida y a la protección, deben respetarse en todo momento”, manifestó el organismo.
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Además resaltó que “desde el comienzo de este año han muerto siete niños palestinos, un niño israelí y muchos más han resultado heridos o se han visto afectados por la espiral de violencia. Como la situación sigue siendo muy inestable, la UNICEF teme que cada vez sean más los niños que sufran”.
“Hacemos un llamado de alerta a todas las partes para que bajen la tensión, actúen con la máxima moderación y se abstengan de utilizar la violencia, especialmente contra los niños y niñas, de conformidad con el Derecho Internacional. La violencia nunca es una solución, y todas las formas de violencia contra los niños son inaceptables. Esto debe terminar”, remarcó la Organización.
Las tensiones han aumentado durante los últimos meses, incluida la muerte de alrededor de 30 palestinos en lo que va del 2023 en operaciones de seguridad y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad israelíes. El viernes murieron siete personas en un atentado ejecutado por un palestino en el asentamiento de Neve Yaakov, mientras que el sábado resultaron heridos otros dos israelíes tras ser tiroteados por un palestino de trece años.
