Al cierre de 4 años de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el país presenta el mayor endeudamiento promedio de las anteriores 5 administraciones, medido como déficit del sector público. En promedio se ha recurrido a 756 mil millones de pesos cada año, 2.7% del PIB, el doble del gobierno de Felipe Calderón.
La falta de una reforma fiscal, la disminución en los recursos de los fondos de estabilización para reducir los efectos adversos en las finanzas públicas, por disminución de los ingresos, caída de los precios del petróleo y una baja recaudación, pondrán retos importantes a la próxima administración 2024-2030, aseguró la organización México Evalúa.
“Esta administración no hizo una transformación de las finanzas pública y obviamente cerca de las elecciones no va a haber una reforma fiscal que intente cambiar estos”, subrayó Mariana Campos, coordinadora del programa de Gasto Público de México Evalúa.
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Al presentar su “Análisis Anual Números de Erario”, la especialista dijo que México se destaca en el mundo por ser un mal recaudador, por lo que es importante que el país tenga una política “seria y contundente respecto al pago de impuesto con un esfuerzo constante para obligar el pago de impuestos”.
Campos comentó que desde 2009 los gastos del sector público son superiores a los ingresos, lo que ha obligado al Gobierno a endeudarse y, por lo tanto, el país mantienen una estructura de finanzas públicas deficitarias.
“Nada más sé continuo con la misma estructura que hemos traído ya desde el 2009 y esto va a poner retos muy importantes a la próxima administración, porque además de que traemos este reto en términos de balance, no tenemos fondos de estabilización, los cuales están muy bajos en saldos y no son útiles para poder reaccionar ante una eventualidad o mayores riesgos en un periodo electoral”, sostuvo Mariana en videoconferencia.
De acuerdo con el análisis de México Evalúa, en 2022 la recaudación total apenas creció 2.5% (163 mil millones de pesos), aunque el ISR creció 11% y los ingresos petroleros crecieron 18.7%, los estímulos fiscales tiraron al IEPS 72% (313 mil millones de pesos) y provocaron un estancamiento del IVA.
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El año pasado, las pérdidas fiscales por políticas energéticas -estímulos a gasolinas, apoyo a Pemex y subsidios a tarifas eléctricas- ascendieron a 671 mil millones de pesos, suficiente para duplicar el presupuesto de los Ramos Autónomos (145 mil millones de pesos), a la Secretaría de Educación (364 mil millones de pesos) y Comunicaciones y Transportes (61.5 mil millones de pesos).
Mariana Campos dijo que la medida de conservar los estímulos fiscales a las gasolinas, beneficia mayormente a la población con más ingresos. “Hasta la fecha los que más pagan IEPS de combustible pertenece a los deciles más ricos pues son los que usan más automóviles, fueron los más beneficiados de los estímulos y subsidios en 2022″, concluyó.
