La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha hecho este martes un llamamiento a las autoridades mexicanas para que lleven a cabo una “investigación exhaustiva” sobre el incendio registrado en el Instituto Nacional de Migración de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuaha, en el que han fallecido al menos 39 migrantes.
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Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha emitido un escueto comunicado en el que reitera el compromiso de la organización para seguir trabajando en el establecimiento de “vías de migración más seguras, reguladas y organizadas”.
“El secretario general lamenta profundamente la muerte de al menos 39 personas en un incendio ocurrido anoche en un centro migratorio mexicano en Ciudad Juárez. Transmite su más sentido pésame a las familias y seres queridos de los fallecidos y desea una pronta recuperación a los heridos”, ha dicho Dujarric.
Previamente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha lamentado el “muy triste” incidente, si bien ha adelantado que fueron las propias víctimas quienes iniciaron el fuego al prender colchonetas en la puerta del albergue como señal de protesta por una supuesta futura deportación.
Aunque en un primer momento las autoridades han informado de 37 fallecidos, más tarde han actualizado las cifras hasta 39 muertos y otros 29 heridos. Las autoridades migratorias de Guatemala han confirmado que 28 de los muertos eran de nacionalidad guatemalteca.
