MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
"Creo que Reino Unido debería trabajar más de cerca con Irlanda en este esfuerzo: nunca se debe permitir que la violencia política vuelva a apoderarse de esta isla", ha precisado, agregando que la paz "necesita ser alimentada", ha recogido el diario 'The Irish Times'.
En este sentido, el mandatario estadounidense ha afirmado que el Acuerdo de Viernes Santo "no solo cambió vidas para mejor en Irlanda del Norte, sino que también tuvo un impacto positivo significativo en toda la República de Irlanda".
Así, Biden ha recalcado que ambas naciones han conocido "dificultades y divisiones". "También hemos encontrado consuelo el uno en el otro", ha dicho, agregando que los "emigrantes irlandeses" fueron la "columna vertebral del progreso de Estados Unidos como nación".
Biden ha intentado enmendar con este discurso la metedura de pata de la víspera, cuando, en un intento por rendir homenaje a la estrella del deporte Rob Kearney, confundió al contar una anécdota en un restaurante en el condado de Louth al equipo de rugby All Blacks de Nueva Zelanda con la fuerza paramilitar británica 'Black and Tans'.
BIDEN VISITA A VARADKAR Y HIGGINS
Más pronto, Biden se ha reunido con el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, en Farmleigh House, la residencia oficial de visitas de Estado, en Dublín. Desde allí, el mandatario estadounidense ha resaltado la "relación emergente" entre ambas naciones.
"Irlanda está en un camino en el que está ocupando el lugar que se merece en el mundo (y) está trabajando para ayudar a aquellos países que lidian con el hambre. La forma en que han recibido a los ucranianos no es fácil y han demostrado liderazgo", ha precisado Biden, según un comunicado de la Casa Blanca.
Por su parte, Varadkar ha señalado, con el telón de fondo de la guerra de Ucrania, que tanto la "democracia" como la "libertad" son valores que están en duda actualmente. "Si no fuera por el liderazgo estadounidense, si Estados Unidos y Europa no trabajan juntos, no sé en qué clase de mundo viviríamos", ha sentenciado.
Posteriormente Varadkar y Biden han salido a los jardines de Farmleigh House para dar un paseo en el exterior y disfrutar de un partido de 'camogie', un deporte femenino tradicional que se juega con una pelota y un palo, conocido por ser una variante del hurling.
En la agenda de Biden también había una cita con el presidente de Irlanda, Michael Higgins, con quien además de reunirse en su residencia oficial, conocida como Áras an Uachtaráin, y firmar el libro de visitas, ha compartido momentos memorables, como la sacudida de la llamada 'Campana de la Paz', instalada para conmemorar el décimo aniversario del Acuerdo de Viernes Santo en 2008. "Esto es para todos mis antepasados irlandeses", ha dicho, mientras tocaba la campana.
Por otro lado, Biden ha plantado un árbol en los terrenos del Parque Fénix, siguiendo con la tradición, ya que este simbólico gesto fue repetido también por anteriores presidentes estadounidenses, como Ronald Reagan, John F. Kennedy, Bill Clinton o Barack Obama, ha recogido la cadena BBC.