El consumo de drogas en Estados Unidos se ha convertido en un problema grave para la población y el gobierno. El tráfico del fentanilo, marihuana y demás productos nocivos, trae de cabeza a las autoridades locales quienes no se rinden ante el aumento de consumo en su territorio.
A esta situación se le podría denominar como una crisis que se convirtió en uno de los principales problemas de salud pública en EU y de la Agencia de Medicinas y Alimentos de Estados Unidos (FDA), la cual autorizó la venta sin receta de Narcan (naloxona), un antídoto para evitar las sobredosis provocadas por fentanilo.
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Este último crece apresuradamente en las calles de Norteamérica debido a que su fabricación resulta ser mucho más barata comparada con la heroína, principal opioide que circula ilegalmente en aquel país.
Las drogas han provocado unas 70 mil muertes por sobredosis en 2022 de un total de las 106 mil registradas en Estados Unidos, con lo cual constituye todo un récord, refirió France 24.
La profesora y asistente clínica de epidemiología en la Escuela de Salud Pública Global de la Universidad de York, Courtney McKnight, realizó junto con su equipo una investigación de campo entre la población que consume algún tipo de droga y estos fueron los resultados.
Realizaron análisis toxicológicos a 313 usuarios de drogas, mismos que respondieron un cuestionario simultáneamente y 162 de ellos contestaron a cuestionamientos más profundos. El resultado fue que el 83% de los participantes dieron positivo por consumo de fentanilo (con o sin heroína) y “solo el 18% dijo que recientemente había usado el fentanilo intencionalmente”.
Para Courtney McKnight, el peligro es una mayor adicción al fentanilo, que es mucho más potente que la heroína, y por lo tanto un mayor riesgo de sobredosis.
