Con el objetivo de que se conozcan y se investiguen las violaciones de derechos humanos cometidos entre 1965 y 1990 en la Ciudad de México entro en vigor de la “Ley Memoria” con la que se busca dar acceso a las víctimas, sus familiares y los sobrevivientes y todo el público a los archivos en posesión de la Administración Pública de la CDMX.
Con este nuevo ordenamiento, promovido por el gobierno de la Ciudad de México, tiene como fin verificar cómo sucedieron tales violaciones, así como revelar a la ciudadanía los motivos y circunstancias en que se cometieron los hechos por parte de los cuerpos de seguridad.
Asimismo, la Ley establece la figura de Sitios de Memoria como aquellos espacios donde se registraron agresiones a la población y en los que las víctimas directas e indirectas, sobrevivientes y comunidades locales consideran que pueden rendir memoria a estos acontecimientos.
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Por lo que son considerados como sitios de memoria:
- La Plaza de las Tres Culturas (masacre estudiantil, 1968)
- Los sótanos de la Plaza Tlaxoaque (sede de los separos de la exjefatura de policía)
- La calzada México-Tacuba, inmediaciones del Metro Normal (por la matanza del jueves de Corpus “Halconazo” en 1971)
Así como aquellos otros espacios públicos que determine la Comisión de la Memoria Histórica de la ciudad.
Preservaran archivos
La Secretaría de Cultura de la CDMX será la encargada de preservar dichos sitios y promover la difusión relacionada con la conmemoración de los hechos, así como elaborar y mantener actualizada una relación de estos lugares.
También se creó el Centro de Documentación y de Investigación de la Memoria, cuya finalidad consiste en reunir, recuperar y preservar archivos y testimonios; realizar las gestiones necesarias para la recuperación de objetos e información; difundir y divulgar sus archivos y testimonios orales, así como propiciar la investigación para contribuir a la educación y difusión.
La Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) de la ciudad será la encargada de implementar y ejecutar acciones para impulsar la conservación, el fomento del patrimonio cultural urbano y los espacios públicos donde se hayan desarrollado estos eventos, considerados objeto de esta ley.
