Renata Rojas es una mexicana que cumplió uno de sus sueños: viajar al Titanic. Antes de llegar a su destino, empezó a bucear desde que tenía doce años. Ha estado en cuevas, en naufragios de barcos, en todos los lugares en donde pueda sumergirse en el oceáno. Estudió oceanografía y se convirtió en oceanógrafa para encontrar el Titanic. Y lo logró.
Rojas, oriunda de Cozumel empezó su travesía cuando se encontraba en bachillerato. Leyó el libro “A Night to remember (Una noche para recordar)”. Desde entonces, comenzó a coleccionar cosas sobre el Titanic: libros, revistas, todo lo que pudiera absorber en lo que encontraba una compañía que organizara viajes hacia el naufragio.
Así encontró Oceangate en 2016. En una entrevista en Youtube explica que el viaje lo había programado para 2012, pero las expediciones fueron canceladas. Cuando encontró la compañía, tuvo que esperar porque la nave Titán, la cual se encuentra desaparecida desde 19 de junio, aún no estaba construida.
La expedición la realizaría en 2019, pero por la pandemia de COVID espero durante dos años; finalmente el viaje lo emprendió en 2022, en el cual fue acompañada por un piloto, investigadores y un equipo especial. De acuerdo con el portal web The Independent, diferentes países e instituciones han tratado enviar expediciones pero no ha sido sencillo, por lo que los derechos de rescate pertenecen únicamente a RMS Titanic Inc.
Los retos de la expedición
La mexicana cuenta en una entrevista en el canal de Youtube Exploring By The Seat Of Your Pants que detrás del viaje hacia el Titanic se encuentran desafíos: hacer un mapa del transatlántico para compararlo con mapas anteriores, recopilar información y especímenes para la ciencia. También se enfrentaron al clima, ya que se enfrentan a las corrientes marinas que pueden llevarlos a cualquier lugar. La investigadora explica que deben encontrar el Titanic una vez que aterrizan.
Detalla que algunos de los desafíos con los que se encontró fueron relacionados a las fallas técnicas: las baterías de la cámara se agotaran o que los sistemas de comunicaciones no sirvieran. Sin embargo, lograron obtener las fotografías y los videos del lugar, además recolectaron especímenes del agua para que los científicos los utilicen en una investigación de ADN.
Explica que hay dos sistemas de comunicaciones; en uno se comunican directamente a la superficie con un equipo técnico y el otro consiste en un sistema GPS. Además, en caso de emergencia, se tiene un sistema de peso los cuales liberas para poder salir a la superficie; y se cuenta con oxígeno y un equipo doble de baterías, alimentos, y hélices, en caso de ser necesario.