El superpeso mexicano volvió a pegarle al precio del dólar y se espera que su fortaleza lleve al tipo de cambio a un récord de 16.74 pesos por billete verde durante julio de este año.
El Banco de México (Banxico) informó que la divisa estadounidense cerró en 17.01 pesos, en operaciones interbancarias; su mejor nivel desde 2015, cuando alcanzó un nivel de 17.04 pesos.
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Lo anterior, después de que el tipo de cambio tocó un nivel mínimo de 16.98 pesos por dólar, en las primeras cotizaciones de este miércoles; cuyo impacto reforzó las previsiones que mantienen al billete verde por debajo de 17 pesos.
Con estos resultados, la supermoneda mexicana alcanzó una ganancia anual de 13.25%, respecto a la cotización del dólar que reportó el Banxico en la primera semana de julio del año pasado.
Además, sumó una apreciación –o aumento en su valor– de 2.57% durante el último mes; equivalente a una recuperación de 45 centavos, frente al nivel de 17.46 pesos que mostró el precio del billete verde el 5 de junio de 2023
Superpeso va por otro récord
La directora de Análisis Económico y Financiero de Banco BASE, Gabriela Siller, señaló que la fortaleza del superpeso se mantendrá durante las próximas semanas, con un tipo de cambio récord de hasta 16.74 pesos.
“El tipo de cambio en México está pasando por un periodo de consolidación, alrededor de 17 pesos por dólar, pero todo parece indicar que seguirá a la baja en las próximas semanas.
“Con esto, en julio pudiera alcanzar un nivel aproximado de 16.74 pesos por dólar”; incluso, “en 2024, si no hay mayor aversión al riesgo global o sobre México, se pude alcanzar un mínimo de 16.40 pesos por dólar, después de la elección presidencial”, señaló la especialista.
¿Qué alimenta al superpeso?
Gabriela Siller explicó que los “fundamentales” o elementos económicos que alimentan e impulsan al superpeso son:
Los flujos de dólares que llegan a México por exportaciones, remesas e inversión extranjera directa.
La política monetaria restrictiva del Banco de México (Banxico), con una tasa de interés de 11.25%, que mantiene el atractivo por invertir en el país, para aprovechar los altos réditos.
La preferencia, a nivel internacional por invertir en pesos. Esto debido a las expectativas económicas que genera el nearshoring; que de materializarse implica mayor inversión extranjera, nuevos flujos de dólares y, por lo tanto, un menor tipo de cambio.
