El bote de la lotería Mega Millions subió a un estimado de 1.050 millones de dólares luego de que nadie logró batir las enormes probabilidades en contra y acertar los seis números ganadores en el sorteo del viernes en la noche.
La combinación ganadora fue 5, 10, 28, 52, 63; bola dorada 18.
La ausencia de un ganador del bote de 940 millones que había en juego el viernes eleva a 29 el número de sorteos consecutivos en los que no se ha entregado el premio gordo. La última vez que alguien se llevó un bote en Mega Millions fue el 18 de abril.
El nuevo bote, que se jugará el próximo martes, sería para un único ganador que elija recibir el premio en un pago anual a lo largo 30 años. Casi todos los que logran botes millonarios optan por el pago en metálico, que para el martes se estima en 527,9 millones de dólares.
Mientras el bote de Mega Millions sigue creciendo, la lotería Powerball repartió hace menos de dos semanas un premio de 1.080 millones a alguien en Los Ángeles, el sexto mayor en la historia en Estados Unidos. La identidad del agraciado sigue siendo un misterio.
Los botes de la lotería son tan elevados porque las posibilidades de ganar son muy bajas. En el caso de Mega Millions, las opciones de llevarse el bote son de una en 302,6 millones.
Los acertantes estarían sujetos a impuestos federales, y muchos estados gravan también los premios de lotería.
Mega Millions se juega en 45 estados, además de en Washington, D.C., y en las Islas Vírgenes de Estados Unidos.
