SAN PEDRO DEL PINATAR (MURCIA), 5 (EUROPA PRESS)
La Guardia Civil ha detenido en San Pedro del Pinatar (Murcia) a dos hombres y una mujer como presuntos autores de los delitos de tráfico de seres humanos, estafa, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, contra los derechos de los trabajadores y de pertenencia a organización criminal.
La investigación, enmarcada en la operación 'Fulcom', se inició el pasado abril, cuando un ciudadano colombiano denunció ante el Instituto Armado ser víctima de una supuesta estafa, según han informado fuentes de la Benemérita en un comunicado.
En su relato refería que después de haber pagado 1.400 euros a un compatriota, bajo promesa de alojamiento y trabajo en España, se encontraba en una precaria situación, sin dinero, durmiendo en el sofá de un piso compartido por el que pagaba 300 euros y sin su situación administrativa regularizada, lo que le impedía trabajar.
Los primeros pasos de la investigación permitieron constatar que existían varias víctimas, todas de nacionalidad colombiana, que habían sido trasladadas hasta el municipio ribereño bajo la misma promesa. La Guardia Civil conoció de la existencia de seis pisos, regentados por el sospechoso, donde alojaban a los recién llegados previo pago del correspondiente alquiler.
Especialistas en Policía Judicial indagaron hasta conocer la identidad de la persona encargada de contactar con sus compatriotas en Colombia y de gestionar el cobro del dinero, a cuenta del viaje en avión y del resto de trámites administrativos como empadronamientos o citas con la Oficina de Extranjería, que son gratuitos.
La fase de explotación de la operación ha culminado con la entrada y registro en el domicilio de los arrestados, donde los agentes se han incautado de diverso material tecnológico --dos discos duros y tres teléfonos móviles--, además de documentación relativa a empadronamientos, trámites de extranjería y contratos de alquiler, entre otros.
11 VÍCTIMAS
Además, en la vivienda, la Guardia Civil localizó a una joven, también originaria de Colombia, que se sumaría a otras 10 personas de la misma nacionalidad, todas supuestas víctimas del entramado delictivo.
Según se desprende de la investigación, la mayoría de las víctimas trabajaban en una fábrica textil ubicada en una zona deprimida de Colombia, acuciada por guerrillas y grupos de narcotraficantes propiedad de miembros del grupo criminal desmantelado, por lo que no desconfiaban de sus patrones cuando les ofrecían ventajosas posibilidades de trabajar en España.
Una vez en territorio nacional, con el fin de que pudieran saldar su deuda y aún sin documentación para su estancia legal, les facilitaban trabajo con identidades de terceras personas y, en el caso de algunas de las mujeres, las incitaban a ejercer la prostitución.
Para culminar el engaño, les hacían creer de la existencia de una abogada encargada de tramitar sus solicitudes de residencia y trabajo con la que solo podían contactar vía WhatsApp, y que resultó ser una de las detenidas.
MIEDO A DENUNCIAR
La precariedad de las condiciones a su llegada al país fue empleada por sus supuestos benefactores para recordarles que serían expulsados de España si denunciaban o si eran identificados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
La operación 'Fulcom' ha culminado con la detención de dos hombres y una mujer, de nacionalidad colombiana, a los que la Guardia Civil atribuye la presunta autoría de los delitos de tráfico de seres humanos, estafa, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, contra los derechos de los trabajadores y de pertenencia a organización criminal.
Los tres arrestados, los efectos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 1 de San Javier.