MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El gasto en turismo ha sido el principal impulsor de este mejor desempeño económico durante los meses de verano, frente a los últimos años en los que la demanda en este sector se encontraba "reprimida" a causa de la pandemia.
Sin embargo, otras partidas que recoge la Fed, como el gasto en artículos no esenciales, ha continuado ralentizándose y algunos de los bancos centrales sugieren que los estadounidenses podrían haber agotado sus ahorros, viéndose obligados a recurrir a más préstamos para apoyar el gasto.
En el lado positivo de la balanza también se encuentran los retrasos en la cadena de suministro, que se habrían reducido durante estos dos últimos meses, lo que permitiría satisfacer mejor los pedidos existentes.
También se ha recuperado el sector de la construcción, aunque se están dando dificultades para poner en el mercado viviendas a precios asequibles, debido al aumento de los costes de financiación y de las primas de los seguros.
CRECIMIENTO MODERADO DEL EMPLEO
El crecimiento del empleo fue moderado en todo el país. Aunque la contratación se ralentizó, la mayoría de los bancos han indicado que se mantiene la persistencia de desequilibrios en el mercado de trabajo, ya que la disponibilidad de mano de obra cualificada sigue siendo baja.
De cara al resto del año, el Libro Beige recoge que "la segunda mitad del año será diferente" en lo que se refiere al crecimiento salarial. Casi todas las entidades apuntan a que el crecimiento salarial se ralentizará a corto plazo.
En tanto, el incremento de los precios también está viviendo un escenario de ralentización general, con mayor incidencia en el sector manufacturero y de los bienes de consumo. Sin embargo, caben destacar los fuertes aumentos de los costes de los seguros de propiedad durante los últimos meses.
Desde la óptica de las empresas, los márgenes empresariales se han reducido a consecuencia de la menor ralentización de los precios de los insumos frente a los precios de venta.