A través de dos nuevos requisitos y multas de más de 40 mil pesos por su incumplimiento, el gobierno de la Ciudad de México busca regular el transporte privado a través de aplicaciones como Uber y Didi, así como generar mayor equidad con los taxis tradicionales en la capital.
Dicha medida es vista como un avance por especialistas como Bernardo Baranda, director para Latinoamérica del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), pues asegura que puede contribuir a mejorar el servicio.
Desde hace años, los cerca de 140 mil concesionarios de taxi en la CDMX se quejan con las autoridades locales de que los operadores de los servicios de transporte a través de apps no cumplen con los mismos requisitos que ellos para brindar sus servicios.
Desde 2020, las autoridades estimaron una mayor cantidad de chóferes de aplicaciones de transporte privado (157 mil), que de concesionarios, esta inequidad, aunada a la necesidad en la mejora del servicio, sirvieron como argumento al gobierno de la CDMX para impulsar la nueva regulación.
El pasado 8 de septiembre se publicó en la Gaceta Oficial de la CDMX el decreto con el que se reforma lo dispuesto en el Reglamento de la Ley de Movilidad local y se imponen dos nuevos requisitos para quienes presten este servicio: la constancia de registro y la constancia de registro vehicular, de los que se encargará la Secretaría de Movilidad (Semovi).
Asimismo, las autoridades capitalinas anunciaron sanciones para quiénes no cumplan con las nuevas disposiciones y eximieron de los pagos de tenencia vehicular, refrendo y accesorios que éstos generaron a los concesionarios de taxi desde 2018 hasta 2023.
“El tiempo dirá si va a ayudar al servicio, sí le pone algunas ventajas a los taxistas tradicionales que, también es cierto, habían sido afectados por la entrada de estos servicios, muchas veces con menos requerimientos. Al final, creo que de lo que se trata es de no bajar el estándar de servicio que para los taxistas, sino más bien que se eleve todo el nivel”.
— Bernardo Baranda.
De acuerdo con el Artículo 237 Bis del Reglamento de la Ley de Movilidad de la CDMX, las multas para los operadores de aplicaciones como Uber o Didi que no cuenten con las constancias expedidas por la Semovi, serán sancionados con una multa de 250 a 400 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente en la capital, es decir, de 25 mil 750 hasta los 41 mil 496 pesos.
Mi Taxi deja dudas
Como parte de los acuerdos anunciados por las autoridades capitalinas con el gremio taxista, se aseguró que la aplicación Mi Taxi, desarrollada por la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) de la CDMX, se mejoró para la seguridad de los usuarios con opciones como el botón de pánico; la opción de compartir viajes en tiempo real y la consulta de información sobre el estatus del vehículo.
Sin embargo, Baranda señala que tras cuatro años Mi Taxi no ha mostrado ser eficaz, y que imponer la app al gremio no es necesariamente la solución. “Es algo que no ha funcionado, me parece cuestionable tratar de imponerles una aplicación”, sostuvo.
Las claves
- Las constancias tendrán una duración de un año a partir de su expedición y tienen un plazo de 30 días para renovarse después de expirar.
- La constancia de registro vehicular tiene un costo de 2 mil 246 pesos y se puede tramitar desde el sitio web del Control de Aplicaciones de Movilidad de la Semovi.
- Las reformas al Reglamento de la Ley de Movilidad de la CDMX entraron en vigor el pasado 8 de septiembre.