La empresa de coworking WeWork pidió la protección de bancarrota al gobierno de Estados Unidos, ya que según sus pasivos ascienden a 18 mil656 millones de dólares, mientras que sus activos valen solo 15 mil 63 millones de dólares.
Adam Neumann, presidente de la compañía, no ha podido restablecerse de las afectaciones provocadas por la pandemia de Covid-19.
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WeWork se fundó en 2010 por Neumann y Miguel McKelvey, ambos estuvieron a cargo hasta 2020, cuando el excéntrico estilo de vida de Neumann llevo a la junta directiva revocó su lugar, además de que SoftBank adquirió 80% de la propiedad de la empresa.
Destaca que los títulos de WeWork en Wall Street cotizaron en 1.05 dólares, un nuevo mínimo histórico con una caída diaria de 54 por ciento.
La mayor ganancia de la empresa provenía de la renta por los espacios de trabajo cuyos atractivos principales eran conocer a personas de otros campos laborales, así como compartir áreas comunes que parecían áreas de juegos.
Durante sus primeros años de existencia, el concepto llamó tanto la atención hasta el punto de conseguir una valoración de cuatro mil 600 millones de dólares en 2014, cifra que atrajo a grandes inversionistas, como JP Morgan Chase o incluso a Masayoshi Son, fundador y director ejecutivo de Softbank.
