El pago del aguinaldo es una prestación que tienen todos los trabajadores en México, equivalente a un mínimo de 15 días de salario; que es producto de tu trabajo y, por lo tanto, debes gastar de forma inteligente.
La economista Mónica Urrutia explicó que dicha prestación debe ser vista como una oportunidad para mejorar tu economía personal o familiar, ahorrar, solventar deudas y, en el menor de los casos, participar en alguna inversión.
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Indicó que el aguinaldo no está peleado con las fiestas y la compra de regalos, pero “todo debe ser con medida”, sin que los gastos de las cenas de Navidad o Año Nuevo, el intercambio de obsequios y las parrandas se coman todo el dinero que recibas.
“De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, los trabajares deben recibir un aguinaldo de 15 días de salario; aunque hay empleados que reciben 30 o 45 días de sueldo, porque así está determinado en su contrato; mientras que los trabajadores de Gobierno reciben 40 a días sueldo.
“Lo más importante es destinar la mayor parte del dinero a cosas prioritarias: pagos pendientes, deudas, mejoras en el hogar e impuestos del próximo año; y esto no se debe ver como un castigo, sino como una oportunidad de tener tranquilidad económica y no tronarse los dedos en enero” apuntó la especialista.
¿Cómo debo gastar mi aguinaldo?
La Condusef y los especialistas en finanzas personales te recomiendan:
- Elabora un presupuesto para tener mayor control sobre el aguinaldo y las prestaciones que recibas durante el fin de año. Esto significa hacer una lista de gastos, pagos pendientes y necesidades de tu hogar; incluidas las deudas y un porcentaje para el ahorro.
- Planea las compras y no te dejes llevar por la emoción ni lleves todo lo que ofrezcan las tiendas, a través de la ofertas o descuentos de temporada; evita dar el famoso “tarjetazo”. Recuerda que el saldo o dinero disponible en este último instrumento de pago no es una extensión del salario y al usarlo debes pagar intereses.
- Destina una parte del aguinaldo para solventar las deudas; algunos especialistas recomiendan utilizar entre 10% y 20% del aguinaldo para acelerar el pago de las cuentas pendientes, sobre todo en tarjetas de crédito, cuyos intereses pueden aumentar de un mes a otro.
- Fija otra partida de 20% o 30% para el ahorro; ello te permitirá contar con recursos para enfrentar un imprevisto o hacer frente a los pagos del próximo año, como el Impuesto Predial, el servicio de agua potable, luz, teléfono, Internet, la renovación de tus seguros, la tenencia o el refrendo vehicular.
- Haz el propósito de invertir o poner a trabajar tu dinero. Una opción viable es hacerlo a través del programa Cetesdirecto o algún fondo de inversión. También es recomendable hacer aportaciones voluntarias en tu cuenta individual de la Afore.
- Si tu aguinaldo y tus ingresos corrientes no te alcanzan para cubrir todas tus necesidades de gasto o pagos, elabora una lista con las tres prioridades que no puedes dejar de cubrir: deudas y gastos fijos: renta, alimentos, agua, luz, teléfono y transporte.
- No destines más de 20 o 25% del aguinaldo a las fiestas, compra de regalos o cosas innecesarias. Los festejos no están prohibidos y todos tenemos derecho a disfrutar del espíritu navideño. Lo que no puedes hacer es desperdiciar los recursos que recibes cada año.