Cinco años antes de que naciera el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, las pantallas de los cines mexicanos se cautivaron con la película Río Escondido, dirigida por Emilio “El Indio” Fernández y protagonizada por María Félix, en la que interpreta a una maestra rural que tiene el objetivo de traer la justicia social a las comunidades a través de la educación.
En el filme de 1948, María Félix interpreta a “Rosaura Salazar”, profesora rural que acude a visitar al presidente de la República a Palacio Nacional con un objetivo encomendado por el presidente de México: viajar a Río Escondido, un pueblo lejano de Coahuila, para alfabetizar a la población. Sin embargo, aunque está dispuesta a cumplir con el encargo hecho por el mandatario, el pueblo está sometido a la tiránica voluntad de Don Regino, presidente municipal de Río Escondido.
En la película, destaca el momento en que “Rosaura Salazar” narra la historia de México a sus alumnos, y la importancia de personajes clave como Benito Juárez, quien ha sido calificado por el presidente López Obrador como el mejor presidente que México ha tenido en su historia.
En su primera clase, “Salazar” menciona a los niños que su objetivo es eliminar “la ignorancia” y quitar “esa venda de los ojos de México”, buscando la “regeneración del país”, con palabras que tienen resonancia en la conferencia de prensa matutina del presidente López Obrador, cuando ha señalado que el pueblo de México “ya despertó” y que es la sociedad “con menor analfabetismo político” del mundo.
“Río Escondido”, película clave en la historia de la cinematografía mexicana
Río Escondido es considerado un drama romántico, pero la historia protagonizada por María Félix bajo el personaje de Rosaura Salazar en el fondo promovió la postura del régimen político, entonces encabezado por Miguel Alemán Valdés.
A lo largo del filme se puede encontrar un reflejo de las aspiraciones posrevolucionarias por alcanzar la civilización y la modernidad. Eso se muestra en simbolismos desde el inicio de la película, por ejemplo, con la llegada de la protagonista a Palacio Nacional, donde el presidente proclama un discurso sobre los problemas sociales que vive el país como la incomunicación en varias zonas del territorio por falta de infraestructura, cuestiones de salud y el analfabetismo.
Bajo estas problemáticas, Rosaura, bacterióloga de profesión, aunque de vocación docente, es elegida para unirse a la brigada de maestros que saldrá a diversas regiones del país a realizar campañas alfabetismo. La situación era muy propia de la época, pues la SEP designaba a diversos docentes para cumplir como maestros de zonas rurales con la consigna de alfabetizar o montar escuelas multigrado.
Una de las curiosidades de la película es que, en el libreto, la protagonista es enviada al poblado de Río Escondido, en el estado de Coahuila, pero cuando pasó de las páginas a la pantalla se filmó en Santa María Tulpetlac, uno de los nueve pueblos originarios de Ecatepec.
