El pasado sábado 13 de enero el gélido clima invernal cubrió Estados Unidos. Al tiempo que una serie de tormentas árticas amenazaba con batir récords de bajas temperaturas en el centro del país, propagar el frío, la nieve de costa a costa y enfriar todo, desde los duelos de playoffs de la NFL hasta las campañas presidenciales.
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Al inicio del fin de semana festivo de tres días por el aniversario del natalicio de Martin Luther King Jr., el pronóstico del tiempo era una extraña mezcla de avisos codificados por colores, desde una advertencia de tormenta de hielo en Oregon hasta una alerta por tormentas de nieve en las llanuras del norte y advertencias de fuertes ráfagas en Nuevo México.
“En general, ha sido un invierno terrible. Y ha llegado de la nada, en dos días”, dijo Dan Abinana mientras observaba un nevado Des Moines, Iowa. Hace años se trasladó a ese estado desde Tanzania cuando era niño, pero señaló que “uno nunca se acostumbra a la nieve”.
En Portland, Oregon, los forenses investigaban una muerte por hipotermia mientras la lluvia helada y la intensa nevada caían en una ciudad más acostumbrada a las suaves lluvias invernales, y cientos de personas se refugiaron durante la noche en centros de calentamiento. A principios de semana ya se habían registrado muertes relacionadas con el gélido clima en California, Idaho, Illinois y Wisconsin.
El gobernador de Nebraska, Jim Pillen, anunció el estado de emergencia, alegando “condiciones muy peligrosas”. Hasta 0.6 metros de nieve cayeron en algunas zonas durante la semana pasada, y la sensación térmica fue muy por debajo de cero.
“Este fenómeno no desaparecerá esta noche. No va a desaparecer mañana”, dijo Pillen en una rueda de prensa. “Va a llevar varios días”.
Alrededor de 2.7 kilómetros de carreteras de Nebraska estaban cerradas. La policía estatal asistió a más de 400 automovilistas varados, dijo el coronel John A. Bolduc, jefe de la patrulla estatal de Nebraska.
En Lowa, autos se quedaron atascados durante cinco horas en la carretera interestatal 80 después que semirremolques se volcaron en condiciones resbaladizas. La policía estatal había atendido 86 choques y 535 llamadas de auxilio desde el viernes, dijo el sargento de la patrulla estatal Alex Dinkla.
“Los equipos de mantenimiento de carreteras estaban trabajando como locos con las máquinas quitanieves, pero los fuertes vientos devolvían la nieve a las carreteras”, dijo Dinkla.
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Gobernadores desde Nueva York a Luisiana advirtieron a los residentes que estuvieran preparados para un tiempo preocupante.
En partes de Montana las temperaturas cayeron por debajo de 34 grados Celsius. El sábado por la mañana, y el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos dijo que se esperaban temperaturas similares hasta el norte de Kansas, con -46 C (-50 F) posibles en Dakota del Norte y Dakota del Sur. En St. Louis, el Servicio Meteorológico Nacional advirtió de un frío poco frecuente y “potencialmente mortal”.
“Ahora hemos tenido múltiples tormentas consecutivas que han paseado por el país. Eso suele ocurrir al menos un par de veces en el invierno de Estados Unidos”.
— Zach Taylor.
Grant Rampton, de 25 años, también de Des Moines, desafió una sensación térmica de 29 grados centígrados para ir en trineo con unos amigos en un campo de golf, combatiendo el frío con capas de ropa, calcetines aislantes y manteniéndose en constante movimiento.
“Es un estado estupendo, pero no hay tanto que hacer, sobre todo en invierno. Puedes buscarte tu propia diversión, como aquí, montando en trineo con tus amigos”.
— Rampton, residente en Lowa.
